Redacción
Petróleos Mexicanos (Pemex) confirmó la muerte de dos trabajadores en la refinería de Deer Park, ubicada en Texas, Estados Unidos. Las víctimas, que no formaban parte de Pemex, trabajaban para una empresa de mantenimiento externa al momento del accidente, el cual también obligó a una reducción temporal en la producción de la planta.
El director general de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, explicó que el incidente ocurrió debido a una fuga de gas sulfhídrico, una sustancia altamente tóxica. El gas se dispersó en la zona de trabajo, afectando directamente a los dos empleados, quienes sufrieron la exposición directa.
Las labores de rescate enfrentaron dificultades, ya que la zona permaneció contaminada durante varias horas, impidiendo el acceso inmediato a los cuerpos. Ambos trabajadores fueron recuperados una vez que el gas se disipó, aunque las operaciones fueron complicadas, ya que uno de los cuerpos se encontraba a varios metros de altura.
El accidente también dejó a 35 personas afectadas, de las cuales 13 fueron trasladadas a hospitales para observación, y se espera que sean dados de alta en las próximas 24 horas. Las autoridades locales y federales de Texas recibieron el reporte del incidente poco después de su ocurrencia, y actualmente se están realizando investigaciones para determinar la causa exacta del accidente.
Rodríguez Padilla subrayó que ninguno de los trabajadores involucrados era empleado de Pemex y aclaró que los afectados pertenecen a empresas estadounidenses contratadas por la refinería. Además, destacó que Pemex está en contacto con las familias de las víctimas y ha activado los seguros y protocolos correspondientes.
La refinería de Deer Park detuvo temporalmente cuatro plantas: una coquizadora, dos de destilación y una planta de desintegración catalítica. Pemex planea reiniciar la producción una vez que las inspecciones confirmen que no hay daños adicionales. Actualmente, la refinería tiene la capacidad de procesar hasta 340 mil barriles diarios, y se espera que la operación regrese pronto a niveles normales de producción.
