Moreno y Martínez, amigos del poder

TOLUCA, EDOMEX.

Las militancias del partido Verde con nexos al PRI le sirvieron 40 mil votos; el alcalde electo también recibe apoyo del ex presidente municipal Juan Rodolfo Sánchez

OMAR MONTALVO
GRUPO CANTÓN

A través de su militancia de izquierda, primero en el PRD y después con Morena, Ricardo Moreno, presidente municipal electo de Toluca, trata de desmarcarse de sus nexos con el ex alcalde priísta de la misma demarcación, Raymundo Martínez. Al respecto, quedan incidentes donde el morenista declaró directamente brindarle apoyo al ahora detenido por varios delitos.

Con el declive del PRI, el municipio de Toluca, ha estado en disputa por los grupos políticos y acuerdos entre sus líderes.

En 2021 cuando Morena le negó a Ricardo Moreno, la candidatura por el ayuntamiento de Toluca, creó la organización Proyecto 21. Desde esta corriente política, Moreno Bastida decidió apoyar a Martínez Carbajal, entonces candidato de la oposición PRI, PAN y PRD. De acuerdo con el mismo Proyecto 21, esta adhesión significó una suma de casi 40 mil votos.

Para devolver este favor, durante la contienda política se filtraron audios de reuniones de operadores de Raymundo Martínez, para apoyar desde el Partido Verde (PVEM), la candidatura de Ricardo Moreno con otras 40 mil firmas.

Pese a esto, el morenista electo se ha deslindado de sus nexos con el ex alcalde de Toluca, ya que Martínez Carbajal es acusado de secuestro exprés a su exsuegro, y abuso de autoridad, pero también enfrenta acusaciones penales por peculado de dinero, y agravios a la cuenta pública por varios actos de corrupción.

Además de la relación de Ricardo Moreno con Raymundo Martínez, misma en la que el dirigente del PRI, Alito Moreno, ha señalado que hay un posible acuerdo, el morenista también es uno de los principales operadores del ex alcalde de Toluca, Juan Rodolfo Sánchez durante 2019-2021.

En el mismo periodo, Moreno Bastida, se desempeñó como secretario del Ayuntamiento. Durante este gobierno, hubo una crisis financiera que obligó al personal de la basura a manifestarse por la falta de pagos, principalmente a policías, bomberos y recolectores de basura. La administración también fue señalada de malversar cerca de 2 mil 400 millones de pesos.