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La economía global afectada por la pandemia, cierre de rutas comerciales y disputas internacionales de la principal potencia mundial, podría traer a México y Latinoamérica a una recesión económica, ¿sabes qué significa esto para tu bolsillo?

La economía de Estados Unidos ha entrado en recesión técnica, esto después de que su Producto Interno Bruto cayera por segundo trimestre consecutivo.

La Reserva Federal (FED) ha estado aumentando las tasas de interés para reducir la creciente inflación pero esto parece no estar mejorando las cosas.

Pero, ¿cómo afecta esta recesión económica de Estados Unidos a México?

La República mexicana tiene como principal socio comercial a Estados Unidos, la dependencia comercial de ambos países puede afectar a nuestra economía al ser uno de los principales destinos de la exportación mexicana.

En caso de que México no sufra una recesión económica, los inversionistas podrían interesarse en el país como destino de inversiones.

En un caso muy optimista, México buscaría nuevos destinos de exportación alrededor del mundo, para evitar ser arrastrados por la caída de Estados Unidos.

Sin embargo, lo más probable es que los efectos negativos de la economía estadounidense terminen arrastrando a México debido a la dependencia comercial.

¿Cómo afectaría una recesión económica a México?

El Banco de México (Banxico) ya anunció las mismas medidas que la Fed de aumentar las tasas de interés en México, lo que significa que muchos compradores que optaban por utilizar créditos buscarán evitarlo.

Esto en realidad afecta grandes mercados, como el sector inmobiliario del país, la inversión de las PyMES, empresas grandes, el sector de la construcción, entre otros. Esto, poco a poco termina afectando a otros sectores económicos y a la población en general.

Las tasas hipotecarias altas hacen caer las ventas de las viviendas, esto arrastra a su vez al sector de construcción y por consecuencia a la venta de materiales.

Las alzas a tasas de tarjetas de crédito afectan a la mayoría de los compradores, y esto, a su vez a las tiendas departamentales, por lo que podría haber recortes de empleo.

El aumento de los desempleos, afectaría a su vez directamente en el mercado interno, y esto acarrea un escenario negativo para los trabajos informales en el país.

Los préstamos para automóviles también terminan afectados, por lo que comprar vehículos será más costoso durante unos años.

Por el momento, serían los inversionistas que reciben las tasas de interés que aumentó Banxico, los únicos que realmente perciben beneficios actualmente.

Sin embargo, la alta inflación que causa que los salarios apenas puedan pagar la canasta básica también afectaría a la generación de empleos.

Con la caída de empleos, el aumento de la inflación y la pérdida de inversiones, podría acarrear un aumento de la pobreza.

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En otros casos, aquellos que no han perdido sus empleos, su poder adquisitivo podría caer, de modo que comprar un vehículo o un hogar sería sumamente difícil.

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