La agenda de salud en los gobiernos de Enrique Alfaro ha significado una transformación de fondo en el sistema estatal y dignificado este servicio desde un enfoque más humano. El legado en Tlajomulco de Zúñiga, Guadalajara y el Estado de Jalisco cuentan la historia de un antes y un después en lo que eran y lo que son los servicios médicos municipales y el sector salud de Jalisco: se pasó del abandonó y saqueó al sistema estatal, a la consolidación de infraestructura y atención médica de primer nivel en todo Jalisco.
Inicia la historia dotando a Tlajomulco de servicios médicos prioritarios
Los servicios de Salud en Tlajomulco eran deficientes, contaban con poco personal y sin atención las 24 horas.
El Gobierno de Tlajomulco emprendió un programa de inversión para ampliar centros de salud y una política de desconcentración de los servicios de atención médica, ambas acciones en coordinación con la Secretaría de Salud Jalisco.
El programa de ampliación de centros de salud implicó una serie de obras en distintas localidades para reconstruir y remodelar las instalaciones, de tal manera que pudiera gestionarse la presentación del servicio de atención médica las 24 horas del día.
Te podría interesar: En Sonora, FGR rescata a 251 migrantes que eran trasladados en contenedores de tren
Obras y proyectos se pusieron en marcha; se emprendió la apuesta por ampliar 10 centros de salud.
En marzo de 2011 se pusieron en operación los Servicios Médicos del Valle. En 2011, abrió sus puertas el Hospital General Regional No. 180 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), mismo que se contempló para dar atención a 300 mil personas y hoy supera estás expectativas. El terreno fue donado por el Ayuntamiento de Tlajomulco y construido por el Gobierno Federal.
Durante la gestión de Alfaro se mejoraron los Servicios Médicos de Tlajomulco, pues se reorientó el gasto con un programa de inversión y gestión de recursos que permitió dotar al municipio de ambulancias y equipo médico.
La Salud en Guadalajara como prioridad para los tapatíos
Al igual que Tlajomulco, Guadalajara estuvo en el olvido.
Durante estos tres años se impulsó con presupuesto municipal y con la gestión de recursos, la mayor inversión en el rubro de salud de Guadalajara: casi 147 millones de pesos para renovar y equipar todas las unidades médicas municipales (Cruz Verdes), equivalente a 230 por ciento más de inversión que la suma de las tres administraciones pasadas. Además, fueron los primeros servicios médicos municipales certificados del país.
Primero Jalisco, primero la salud
En poco más de cinco años la refundación del sistema de salud comenzó de cero.
A su llegada al Gobierno de Jalisco, Enrique Alfaro puso orden en el sistema de salud, destapando las redes de corrupción que hacían mal uso del dinero para la atención medica de los jaliscienses y llevó a proceso judicial a ex funcionarios del anterior gobierno.
En cinco años, el hoy mandatario pudo hacer posible lo imposible al duplicar el presupuesto en salud, dando soporte al sistema sanitario de Jalisco ante el precario crecimiento que tuvo el presupuesto federal.
Hoy hay más centros de salud concluidos y certificados, y los ya existentes fueron renovados, además de que se crearon hospitales destinados para la mujer y otros proyectos que están en construcción como el Hospital Civil de Oriente y el Instituto Regional de Cancerología.
Además, Enrique Alfaro hizo posible, por ley, que todas las niñas, niños y adolescentes que padecen cáncer o diabetes infantil reciban atención gratuita universal, y para ofrecerles un espacio de primera se renovó el Centro de Atención Integral de Oncología y Hematología Pediátrica de los pisos 7 y 8 del nuevo Hospital Civil Juan I. Menchaca, y adicionalmente, para atender otro tema prioritario, se construyó la Unidad de Atención Integral a niñas, niños y adolescentes con quemaduras en el antiguo Hospital Civil.
Otro logro fue la basificación de trabajadores del sector salud, haciendo justicia laboral a las enfermeras, enfermeros, médicos, médicas y personal administrativo que por años prestaron sus servicios sin ni siquiera contar con las prestaciones mínimas y el debido reconocimiento a su trabajo.
Te podría interesar: SLP mantiene primer lugar nacional en crecimiento industrial
El abasto de medicamentos en Jalisco es del 90 por ciento actualmente. Además, se han distribuido ambulancias entre los 125 municipios.
El mejor acierto para mantener sólido el sistema de salud de Jalisco fue la decisión del Gobernador Enrique Alfaro de no entregarlo al extinto INSABI del Gobierno Federal y así poder lograr todas estas acciones y haber hecho frente a la pandemia de COVID-19 al tomar las mejores decisiones a nivel nacional, salvando miles de vidas.
También se optimizaron los servicios de salud con el expediente clínico electrónico en todo el Estado, mediante el cual se facilita y agiliza el acceso al historial médico de pacientes para que, por ejemplo, en caso de emergencias, puedan recibir una atención más adecuada.