El alcalde Nazario Gutiérrez presume inversiones superiores a 10 millones de pesos para pavimentación, y alumbrado; sin embargo, familias acusan lentitud e indolencia
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
El gobierno municipal de Texcoco volvió a montar su ya tradicional operativo de anuncios, como lo ha sido en todo el año con discursos que prometen mejoras sustanciales y un despliegue completo de funcionarios, el alcalde Nazario Gutiérrez Martínez presentó la puesta en marcha de nuevas obras de pavimentación, alumbrado público y la construcción de una unidad deportiva, con una inversión que supera los diez millones de pesos.
La escena, sin embargo, es conocida por los texcocanos: una inauguración más, fotos oficiales, aplausos… y después, el silencio administrativo que ha caracterizado a esta gestión.
En las comunidades destinatarias de estos proyectos, como San Luis Huexotla, San Mateo Huexotla o Lomas de San Esteban, la reacción dista del entusiasmo. La gente ya no se deja deslumbrar por cifras ni discursos.
“Aquí anuncian lo mismo cada año, pero las calles siguen igual. Los baches parecen crecer, no las obras”, comenta José Luis, comerciante de Huexotla.
La inconformidad es el resultado de años en que las inversiones públicas, que según reportes oscilan entre 170 y 200 millones de pesos anuales, no se reflejan en mejoras palpables.
Vecinos describen un patrón repetido: se anuncian obras con bombo y platillo, pero la ejecución avanza a cuentagotas o simplemente no avanza.
“Cada administración recicla los proyectos. Le cambian el nombre, ponen un nuevo letrero y vuelven a prometer. Pero seguimos caminando sobre lodo”, afirma doña Carmen, habitante del Sector Popular, quien recuerda que una pavimentación anunciada en su calle ha sido presentada ya en tres periodos municipales distintos sin completarse.
La falta de transparencia también es un reclamo constante, pues entre cambios de contratistas, retrasos injustificados o trabajos realizados a medias, las obras parecen perderse en una cadena de inconsistencias que ningún funcionario explica. Vecinos señalan que el Ayuntamiento no publica avances reales, ni calendarios verificables, ni reportes claros del uso del recurso.
“No necesitamos otra inauguración. Queremos ver maquinaria trabajando, queremos ver cambios”, exige Mario, vecino de Lomas de San Esteban.
Mientras tanto, la infraestructura básica del municipio continúa deteriorándose. Las calles siguen en mal estado, el alumbrado público falla en decenas de zonas y los espacios deportivos prometidos se convierten en terrenos olvidados.
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