Grupos de alto control religioso han sometido a menores a recibir abuso sexual, jornadas extremas, aislamiento y obediencia total, con graves consecuencias físicas y emocionales.
Fernando Ortiz
Ciudad de México.- Dentro de templos que presumen espiritualidad, personas han sufrido toda clase de abusos, desde sexual, explotación laboral y control psicológico extremo, y lo que para muchos parece devoción, para varias víctimas fue un sistema de sometimiento donde la fe se usó como arma. Hoy, esas sobrevivientes exigen que estos delitos, cometidos durante años en completo silencio, finalmente salgan a la luz.
Entre las denuncias más frecuentes se encuentran explotación laboral, abuso sexual, manipulación psicológica, abandono infantil y limitación de libertades básicas, prácticas documentadas en distintos momentos dentro de algunos grupos vinculados a movimientos neo-hinduistas y cristianos.
En un testimonio que expone la gravedad de los abusos cometidos por el templo Hare Krishna, se relataron las condiciones de explotación, violencia y abandono que vivió, desde la infancia.
La denunciante, misma que pidió mantener su nombre en anonimato, explicó que fue ingresada cuando era una niña, “Yo fui captada siendo una menor por una tía y empecé a acceder al templo a la edad de 10 años”. Desde entonces, afirmó, perdió su autonomía e identidad debido al ambiente coercitivo que la rodeaba.
“Lo que te viene ahí es una cohesión que te hace perder tu identidad más siendo una niña, que no has generado ni siquiera una identidad ni una autonomía”, lamentó.
Dentro del templo, aseguro, fue víctima de múltiples formas de violencia “Lo que yo viví ahí, pues, fueron desde abuso sexual hasta descontinuar mis estudios por muchos años, incluso jornadas de explotación laboral extensas, todo el día”.
Si bien la mayoría de las comunidades religiosas incluidas las vinculadas al movimiento o a denominaciones cristianas no participan en estas prácticas, diversas investigaciones señalan que ciertos templos o líderes individuales han sido señalados por cometer abusos amparados en estructuras jerárquicas rígidas y mecanismos de obediencia absoluta.
Colectivos de sobrevivientes describen dinámicas similares en diferentes grupos, captación en edades tempranas, aislamiento social, obediencia total a líderes espirituales y actividades diarias que pueden incluir trabajos exhaustivos sin remuneración.
“Las actividades empezaban antes del amanecer y no se permitía cuestionar nada. El tiempo, las decisiones y hasta la alimentación estaban controladas por los líderes”, afirmó la entrevistada.
A pesar de las largas jornadas, la alimentación era insuficiente, “Tú trabajas para sostener, a veces no te dan ni un plato de comida”, denunció la joven, también agregó que desarrolló problemas de salud graves.
“He tenido que ir hasta el hospital justamente porque tuve anemia por el hecho de no comer bien y consumir una dieta vegetariana a tanta edad me dañó mucho mi salud”, cuestionó.
Los testimonios, además, coinciden en señalar que estos abusos no son casos aislados, ya que “Hay muchos casos de abandono a infancias en templos por parte de sus padres, tenemos varias denuncias desde Argentina y también en México”, explicó.
Incluso, advirtió que la pederastia ha estado documentada desde hace décadas: “Lo más fuerte, está documentado desde los años setentas, pues, la pederastía, ¿no? en contra de las infancias”.
Pese a esto, señalan que “los líderes que han enfrentado estos cargos están en total libertad y percibiendo cargos donde guían a otras personas. Eso es muy peligroso”.
Diversas investigaciones han registrado casos de abuso sexual contra menores, especialmente en comunidades donde niños viven separadamente de sus padres.
Especialistas en religiones comparadas explican que estas prácticas no son propias de una religión específica, sino de cualquier estructura de alto control que dependa de líderes carismáticos, normas estrictas y aislamiento del mundo exterior.
Acusaciones de abuso en La Luz del Mundo
Uno de los ejemplos mas conocido es el de la organización religiosa La Luz del Mundo , la cual ha enfrentado acusaciones de abuso sexual, explotación laboral y abandono infantil que se remontan a varias décadas, diversas investigaciones y denuncias han documentado casos de pederastia y manipulación de menores, así como jornadas de trabajo excesivas impuestas a niños y jóvenes dentro de sus templos.
Diversos reportes señalan que, en algunos casos, los menores son obligados a cumplir con horarios desde las 4 de la mañana hasta altas horas de la noche, muchas veces sin acceso adecuado a alimentación, lo cual se ha tomado como una constante entre grupos religiosos.
“En el templo se inician las actividades a las 4 de la mañana y no paramos hasta las 10 de la noche”, mencionó una víctima.
Naasón Joaquín García, quien fuese lider de la secta religiosa, ha sido acusado en Estados Unidos de delitos graves que incluyen tráfico sexual, explotación infantil y producción de pornografía infantil.
En 2022 fue condenado en California a 16 años y ocho meses de prisión tras declararse culpable de abuso sexual a menores, actualmente enfrenta nuevas acusaciones federales que podrían llevar a una cadena perpetua.
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