Sin muchas aspiraciones en ambos casos para el cierre de temporada, Cowboys y Raiders finalizaron la semana 11 de la NFL con un encuentro totalmente desbalanceado y con los de Dallas aún en busca de rescatar algo de su campaña.
Con un marcador final de 33-16, los Cowboys consiguieron su cuarta victoria de la campaña ante uno de los peores equipos de la Conferencia Americana, que firmó su octava caída del año con el juego disputado en Las Vegas, Nevada.
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Conseguida su primera victoria en partidos de horario estelar en lo que va del 2025, Dallas se mantiene segundo en el Este de la Conferencia Nacional, solo debajo de Philadelphia, pero alejado de las marcas de los otros segundos lugares en la NFC para pensar en un sitio de comodín para la postemporada, con Packers, Panthers y Seahawks con un mínimo de seis victorias.
Liderados por Dak Prescott que tuvo su mejor partido de la campaña hasta el momento, el lanzador de Dallas concluyó el juego con 268 yardas y cuatro pases de anotación, distribuidos con Pickens, Lamb, Ferguson y Flournoy.
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En total fueron 381 yardas las que registraron los Cowboys, a diferencia de las 236 que apenas completaron los Raiders, ubicados en el fondo de la división Oeste en la Conferencia Americana.
