Edgar H. Clemente/La Jornada/Tapachula, Chis. – Una nueva caravana de más de mil migrantes salió este miércoles de esta ciudad fronteriza con Guatemala donde denuncian la falta de oportunidades de trabajo y respuesta a sus peticiones de asilo ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados aún cuando llevan meses en los trámites.
El grupo integrado en su mayoría por cubanos aunque también hay de otras nacionalidades de Centro y Sudamérica, partió del parque Bicentenario y se enfiló hacia la carretera México 200 para avanzar hacia el norte.
Van acompañados de media docena de patrullas de la Secretaría de Marina, Guardia Nacional, Instituto Nacional de Migración, Policía Estatal y Policía Municipal, que auxilian el tránsito vehicular.
La cubana, Yamile Sarmiento, dijo que salió huyendo de la dictadura y se vio obligada a vender sus pocas pertenencias para costearse la travesía.
“Nos decidimos mover porque no nos dan papeles, no nos quieren dar trabajo, y necesitamos avanzar porque salimos de Cuba para avanzar, para ayudar, por lo menos, yo dejé a tres niños que dependen de mí”, narró la isleña.
El ecuatoriano, Jaime Zepeda, quien viaja con un hijo mayor de edad, contó que salió de su país debido a la violencia del crimen organizado.
El hombre de 51 años dijo que a su edad también se complica conseguir trabajo, este año la empresa en la que laboraba como asesor comercial cerró debido a constantes apagones.
“Aparte de la falta de empleo, nos ha tocado tomar la decisión de buscar un mejor mañana para la familia”, comentó.
Los migrantes de la caravana pidieron al gobierno de la presidenta, Claudia Sheinbaum, que les brinde ayuda para poder regularizar su estancia en el país ya que lo único que quieren es conseguir un trabajo que les permita ayudar a sus familias.