Esta madrugada, un grupo de activistas de Greenpeace México tomó la Estela de Luz en Paseo de la Reforma, Ciudad de México, como escenario de protesta. Su objetivo fue claro: exigir la protección inmediata de la Selva Maya, una de las regiones más biodiversas y vitales del país.
También te puede interesar: Sheinbaum destaca unión de México, Guatemala y Belice para proteger la selva Maya
Nueve integrantes del grupo escalaron los 104 metros del monumento mientras el resto desplegaba una manta con el mensaje: “Selva Maya grita, Semarnat sálvala”.
La acción se enmarca dentro de la campaña “México al grito de Selva”, que busca visibilizar la deforestación y la presión de la industria sobre esta región. Carlos Samayoa, coordinador de la campaña, advirtió que en los últimos cinco años se han perdido cerca de 300 mil hectáreas de selva, una cifra alarmante que supera décadas de conservación.
Además, señaló que la industria inmobiliaria, hotelera y minera continúa presionando para explotar recursos naturales con el aval de autoridades ambientales.
Otras causas de protesta en la Estela de Luz
La protesta también respondió a la preocupación por la extracción de bancos de material pétreo, conocida como “sascaberas”, autorizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y operada por empresas como Cemex.
Greenpeace denuncia que estas acciones dañan ecosistemas clave, contaminan acuíferos y amenazan la supervivencia de comunidades que dependen de la selva. Por ello, la organización exige la suspensión inmediata de los permisos y la implementación de medidas que aseguren la conservación integral de este espacio.
El despliegue en la Estela de Luz no solo buscó visibilizar la problemática, sino también despertar un debate público sobre la necesidad de equilibrar desarrollo económico con cuidado ambiental.
Greenpeace insta a la sociedad y a las autoridades a actuar con urgencia, porque la pérdida de la Selva Maya no solo afecta a la biodiversidad, sino también a la seguridad hídrica y climática de México.
También te puede interesar: Greenpeace México regresa a las sedes de los partidos políticos su “basura electoral”
Con esta acción, los activistas demostraron que la defensa del medio ambiente requiere presencia, valentía y conciencia colectiva, recordando que cada decisión hoy impacta directamente en el futuro de generaciones venideras.
