La industria pesquera de Yucatán reconoció que la marea roja ya impacta en la economía del sector, debido a la suspensión de actividades, lo que afecta a más del 21 por ciento del total del padrón de pescadores, cuando están en plena temporada de captura de pulpo.
Por: Juan Manuel Contreras
Sin embargo, sus dirigentes aseguraron que la situación es temporal y que los productos
que llegan al mercado cuentan con inocuidad garantizada.
Enrique Sánchez Sánchez, presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Pesquera y Acuícola (Canainpesca) en el estado, informó que la declaratoria de veda en la zona poniente del litoral ha obligado a suspender la captura de pulpo, lo que mantiene en pausa a unos tres mil pescadores.
De acuerdo con cifras del sector, en Yucatán existen alrededor de 14 mil trabajadores
activos, con más de 20 mil familias que dependen directamente de esta actividad. Aunque
se espera que la contingencia dure alrededor de dos semanas, los líderes pesqueros
advirtieron que sí habrá un impacto en la meta de captura anual, especialmente en la
temporada de pulpo.
“La flota de mediana altura, la más grande del Golfo de México, sigue operando con
normalidad desde Progreso hacia el oriente del estado. Son alrededor de 400 barcos los
que continúan pescando”, precisó.
Durante la temporada actual de pulpo, que comenzó el 1 de agosto y corresponde a la más importante por su nivel se captura, se proyectaba obtener 29 mil toneladas, cifra similar a la registrada en 2024, por lo que la veda dificulta llegar al objetivo.
Garantizan seguridad ante Marea Roja en Yucatán
El dirigente de Canainpesca recalcó que los productos que ingresan a las plantas
procesadoras en Progreso y a las certificadas para exportación “están en excelentes
condiciones y con total garantía de inocuidad”.
Por su parte, José Luis Carrillo Galaz, presidente de la Confederación Mexicana de
Cooperativas Pesqueras y Acuícolas coincidió en que las afectaciones son
reales, pero criticó la información oficial, pues “ha generado alarma en el consumo y en el turismo”.
“En Yucatán no tenemos moluscos filtradores como almejas y ostiones, que son los que acumulan toxinas”, señaló.
Consideró que la marea roja en la entidad mata especies por falta de oxígeno, pero contrario a lo señalado por el Comité Interinstitucional, no es tóxica para el ser humano. “No hay registro de intoxicaciones en más de 20 años”.
Finalmente, los dirigentes llamaron a la población a consumir con confianza los productos
pesqueros yucatecos y evitar caer en alarmas infundadas: “este fenómeno es natural y
recurrente, como los huracanes o las tormentas. Pasará pronto y la actividad se
normalizará”, coincidieron.
Playas desiertas
Durante un recorrido de este medio por las playas y el malecón de Progreso, se
constató escasa presencia de visitantes, a pesar de encontrarse en la recta final de las
vacaciones de verano.
Sólo algunas familias disfrutaban del sol sobre la arena, mientras pocas personas ignoraron la recomendación de las autoridades de no ingresar al mar.
Las especies marinas ya no se observan cerca de la orilla, y la presencia de algas
disminuyó; sin embargo, el tono característico del agua de las costas yucatecas aún no se
restablece. La baja afluencia también se reflejó en los restaurantes.
El Comité Interinstitucional de Seguimiento y Evaluación de Marea Roja indicó en su
informe más reciente que los análisis de laboratorio, realizados en la franja costera de
Progreso a Celestún, no muestran cambios significativos, por lo que continúan vigentes las medidas preventivas, como no ingresar al mar.