Redacción
Un derrumbe en la mina subterránea El Teniente, ubicada en la región de O’Higgins, activó una operación de emergencia luego de que una persona falleciera y otras cinco quedaran atrapadas a casi 900 metros de profundidad. El incidente también provocó lesiones en al menos nueve trabajadores y generó la evacuación de más de tres mil personas dentro del complejo.
El colapso ocurrió en el sector conocido como Proyecto Andesita, una red de túneles con múltiples puntos de extracción. La emergencia se relaciona con un temblor ocurrido en la zona, aunque aún no se ha determinado si el movimiento telúrico fue de origen natural o si se derivó de las propias actividades mineras.
Los equipos de rescate enfrentan dificultades para acceder a la zona afectada, debido al desprendimiento de materiales que bloqueó las galerías. Las labores continúan en medio de condiciones complejas, mientras las autoridades concentran sus esfuerzos en localizar y extraer a los mineros atrapados.
El gobierno chileno envió a la ministra de Minería al lugar y suspendió actividades oficiales para supervisar directamente las acciones. La Fiscalía también inició una investigación para esclarecer lo sucedido y definir si existen responsabilidades o negligencias por parte de las empresas involucradas.
Chile mantiene una posición relevante en la minería mundial, pero los accidentes en faenas subterráneas persisten como un riesgo latente. El país ha enfrentado tragedias similares en años recientes, recordando la constante exposición de sus trabajadores a fenómenos naturales y condiciones extremas en los yacimientos.