Una pausa para ti.
Normalmente en esta sección comparto información relevante acerca de la diversidad de terapias que existen hoy en día, considero que a partir de la pandemia surgió el boom de la importancia por la salud mental y bienestar en general. De ahí surge mi interés por explorar las diferentes terapias. Primero investigo, en ocasiones las tomo y desde mi experiencia las escribo.
En esta ocasión so pretexto de la temporada vacacional, no salí de la ciudad, pero quería darme un espacio que empatara con seguir explorando el tema y acudí al circuito Wellness en Bienesta, me considero una mujer tan inquieta que es difícil que me relaje en horas de luz, ya que mi mente está programada a que la noche es para descansar y en esta ocasión mi sistema entró en una espiral de relajación que intentaré explicar cómo fue que lo logré y me quedé profundamente dormida. Aun así, cuando llegó la noche dormí perfecto, les platico:
Antes de iniciar reitero la importancia de rodearse de profesionales en el tema de salud.
Los consejos y la guía de Nathaly Marcus experta en epigenética y longevidad, me fueron llevando por todo el circuito y la explicación de cada uno de los procesos, ahí mismo en Bienesta me surtí de los suplementos que me indicó, es importante una primera consulta para que tu recorrido tenga todos los beneficios que mereces. El primer paso fue el In body, es un analizador de composición corporal que utiliza la tecnología para medir y proporcionar información detallada sobre composición del cuerpo, incluyendo la grasa corporal, la masa muscular, el agua en el cuerpo, peso, estatura y la masa ósea. Es lo más parecido a una báscula que mide todo lo anterior, revelando los resultados en unos minutos.
El circuito lo inicié en un sauna, los beneficios de la luz roja son reducir los signos visibles del envejecimiento, promover una piel sana, suave y radiante a cualquier edad, también alivia el dolor muscular o de articulaciones y aumenta la circulación sanguínea. La cabina es individual, el espacio es de profunda paz acompañado de música y aromas que sensorialmente comienzan con efecto de relajación física y mental.
Continué con un tiempo de presoterapia, indicada para lograr un drenaje linfático en personas que presentan problemas médicos y estéticos, como las alteraciones en el sistema circulatorio, piernas cansadas, arañitas vasculares, edemas, celulitis y acumulación de grasa. La luz infrarroja, produce calor termodinámico, y frecuencias de nano vibraciones en cada una de las zonas del cuerpo de pies a torso, que se envuelven por secciones y la máquina infla poco a poco cada sección y despresuriza después de unos segundos, la sensación es como un masaje que va descontracturando cada zona del cuerpo. Cabe destacar que la aparatología, y profesionalismo de cada terapeuta de Bienesta es de primer nivel.
Y ya cuando llegó mi desconexión total, fue con la terapia de Brain tap. Una tecnología que utiliza luz, sonido y frecuencias para inducir el estado de relajación completa en el cerebro. En este estado, el cuerpo se repara y se regenera. El cerebro se sincroniza con las ondas específicas necesarias sin esfuerzo alguno. Se trata de unos audífonos con música en diferentes frecuencias de las ondas cerebrales: beta, alfa, theta y delta. Los auriculares también están equipados con un visor LED que destella luces en sincronía con la música y ahí comienza una experiencia inmersiva que aísla por completo del sonido externo llevándonos a un estado de profunda relajación y claridad mental.
Tú eres el protagonista de tu historia, vívela y gózala cuidando tu salud… vida solo hay una y opciones de terapias muchas.
Con cariño: Marcela.
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