Redacción
Una secuencia de sismos en Guatemala provocó la muerte de siete personas, múltiples heridos y más de dos mil damnificados en varios departamentos del país. Las autoridades reportaron daños considerables en viviendas, carreteras y edificios históricos, mientras continúan las réplicas en la zona afectada.
Los temblores comenzaron con fuerza el martes por la tarde, con epicentro en las cercanías de Amatitlán y Alotenango, al suroeste de la Ciudad de Guatemala. Desde entonces, el servicio sismológico contabilizó 348 movimientos, algunos con una magnitud de hasta 5.7 grados. La región se ubica en una zona de alta actividad tectónica, donde confluyen varias placas y fallas locales.
La comunidad de Santa María de Jesús se encuentra entre las más impactadas, con la mitad de sus viviendas afectadas y varios caminos bloqueados por derrumbes. El gobierno habilitó un puente aéreo para llevar ayuda humanitaria y atender a las personas que quedaron incomunicadas.
En total, la Coordinadora para la Reducción de Desastres reportó más de 370 viviendas dañadas, nueve personas heridas y afectaciones en al menos 25 carreteras. Cerca de 600 personas permanecen en albergues, mientras se realiza la evaluación estructural en las zonas más expuestas.
Las clases y las actividades laborales retomaron su curso en los departamentos más golpeados: Guatemala, Escuintla y Sacatepéquez. Sin embargo, el sistema de salud continúa en estado de alerta máxima y se mantiene el monitoreo constante ante la posibilidad de nuevas réplicas en los próximos días.
