Redacción
El comercio digital vuelve a concentrar miradas este julio con el regreso del Prime Day, una de las jornadas de descuentos más relevantes para Amazon y sus suscriptores. En su edición 2025, el evento se divide en dos etapas: una fase internacional del 8 al 11 de julio y una semana completa de promociones en México del 15 al 21. La extensión responde al crecimiento sostenido de ventas y demanda en el país.
Diseñado para miembros activos del servicio Amazon Prime, el Prime Day ofrece rebajas temporales en decenas de categorías, incluyendo tecnología, moda, hogar y productos exclusivos como dispositivos Alexa o Kindle. Además, la plataforma activa alianzas con bancos para sumar meses sin intereses y descuentos extra en pagos selectos.
El evento se desarrolla en simultáneo en más de 25 países, con Irlanda sumándose por primera vez a la lista. Con esta expansión, Amazon busca consolidar su presencia en mercados estratégicos y posicionar su evento como alternativa frente a temporadas como el Buen Fin o el Black Friday.
La empresa también retoma su estrategia de marketing con creadores de contenido que recomiendan productos bajo curadurías personalizadas. Estas iniciativas, junto a las ofertas relámpago y la infraestructura logística ajustada para entregas en tiempos reducidos, refuerzan su apuesta por liderar el comercio en línea.
La participación se limita a usuarios Prime, quienes obtienen acceso prioritario a los descuentos además de beneficios como envíos sin costo, streaming de series y películas, acceso a videojuegos y contenido exclusivo. Para nuevos usuarios, existe la posibilidad de activar una prueba gratuita por 30 días y así aprovechar el evento sin pagar adicional.
En ediciones anteriores, Amazon logró cifras récord en entregas y suscripciones, con México destacando como uno de los países con mayor crecimiento. Este año, la empresa proyecta romper nuevamente sus marcas, tanto en número de transacciones como en alcance de mercado.
Más allá del consumo inmediato, Prime Day opera como un indicador de las tendencias en comercio digital, la evolución del comportamiento de compra y la forma en que las plataformas de tecnología moldean el panorama minorista a nivel mundial.
