El abstencionismo, con cifras preliminares de 87% en la elección judicial, tendrá como consecuencia que al menos 522 millones de boletas de ministros, jueces y magistrados sean destruidas y probablemente terminen como basura ecológica.
Para la elección se imprimieron poco más de 601 millones de boletas, pero se estima que los que asistieron a las urnas solo utilizaron poco más de 70 millones de boletas.
Los funcionarios empaquetaron las boletas no usadas y las trasladaron a las bodegas de los 300 Consejos Distritales, donde esperan el acuerdo del INE para destruir el material no utilizado en los pasados comicios.
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En la elección federal de 2024, de acuerdo con información de 24 HORAS, sobraron 117 millones de boletas de las elecciones presidencial, de senadores y diputados, cuyo valor fue de 217.7 millones de pesos, a razón de 1.85 pesos por cada papeleta.
Para esta elección no se tiene el costo por boleta de jueces, magistrados y ministros, pero tomando como base el precio unitario de 2024, la cifra que se desperdiciaría en la elección judicial superaría los 973 millones de pesos.
Otros desperdicios
Durante la consulta popular de 2021 para juzgar a expresidentes, también organizada por el INE, el 92.8 % de los votantes prefirió no ejercer su voto.
De acuerdo con las estadísticas, la Lista Nominal fue de 93.6 millones de electores, mientras solo votaron 6.6 millones, por lo que la mayoría de boletas quedaron sin usarse.
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Para la consulta de la revocación de mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador, en 2022, el abstencionismo fue de 82.2%. En ese ejercicio, 92.8 millones de mexicanos podían votar, pero solo 16.5 millones acudieron a las urnas, por lo que las autoridades también destruyeron la mayoría de las boletas.
A diferencia de elecciones pasadas, donde los funcionarios de casilla inutilizaban las boletas sin usar ante observadores y partidos, en estos comicios judiciales se aplicó un mecanismo inédito debido a su complejidad.
Boletas especiales
Las boletas sobrantes fueron inutilizadas en paquetes de 100, es decir, las que no se utilizaron se guardaron en una bolsa y con un sello especial, que deja huella de ser manipulado, y se guardarán en bodegas hasta que el Consejo General del INE autorice su destrucción.
Miguel Ángel Patiño, director de Organización Electoral, explicó que los bloques de boletas recibidos en las casillas se colocarán, según las instrucciones al reverso, en sobres-bolsa específicos. Cada sobre se usará según el color de la boleta, y se depositarán los bloques sobrantes en la cantidad correspondiente. Añadió que los sobres tienen un cintillo morado con pegamento especial que, al retirarse, deja una marca visible como medida de seguridad.