El caso de Madeleine McCann, una niña británica de tres años de edad que desapareció sin dejar rastro en 2007 cuando se encontraba en un departamento donde ella y su familia vacacionaban en Portugal, consternó no solo a los portugueses, pues su caso se volvió mediático a nivel internacional.
18 años después, investigadores portugueses y alemanes reabren el caso de Madelein con operaciones de búsqueda cerca del lugar donde “Maddie”, como era llamada por su familia, desapareció.
Foto: AFP
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Desde el marte 3 de julio, vehículos de la policía portuguesa y alemana circularon por una zona cercana a la localidad turística de Praia da Luz, en el municipio de Lagos, donde se ubicaba el inmueble en el que se le vio por última vez.
Por la tarde del miércoles (18:00 horas locales) concluyeron la inspección en una construcción en ruinas ubicada en una zona boscosa y llena de matorrales, donde participaron al menos 25 agentes de investigación alemanes.
Las investigaciones continuarán al menos hasta el jueves o viernes.
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Un sospechoso
La reapertura del caso de Madeleine McCann corresponde a una investigación preliminar de la fiscalía de Brunswick en Alemania, contra Christian Brückner, un alemán ya condenado por violación y que la justicia cree que podría haber matado a la Maddie.
Netflix visibilizó aún más el caso a nivel internacional con un documental titulado “La Desaparición de Madeleine McCann”, en la que recapituló los detalles del caso desde el día cero, hasta las últimas investigaciones, de las que no se habían obtenido grandes resultados.
En 2020, autoridades alemanas informaron sorpresivamente “estar seguros” de que Brückner está relacionado con la desaparición de la niña de tres años. En el momento de los hechos, el sospechoso vivía en la costa portuguesa de Algarve, muy cerca de donde vacacionaba la familia McCann en 2007.
Las últimas investigaciones y excavaciones relacionadas con el caso se realizaron en 2023, justamente en un lago localizado en la zona turística de Algarve, sin resultados.