Redacción
El Club América ha consolidado su dominio reciente en la Liga MX al alcanzar una marca histórica: ha sido el primer equipo en disputar siete semifinales consecutivas en torneos cortos. Esta consistencia lo ha convertido en un protagonista habitual de las fases finales, reforzando su etiqueta de equipo grande del fútbol mexicano. Ningún otro club ha logrado tal regularidad en la era moderna del campeonato.
A pesar de este logro, el América aún no ha igualado el récord absoluto de finales consecutivas en la Liga MX, que es de siete. Sin embargo, ha alcanzado en dos ocasiones tres finales seguidas, una hazaña que muy pocos equipos han podido replicar. La primera vez fue en la década de los 80, cuando conquistó tres títulos al hilo, y más recientemente, desde el Apertura 2023 hasta el Apertura 2024.
En esta nueva etapa dorada, el América ha buscado igualar la gesta de su propia historia, ganando títulos consecutivos y manteniéndose en la élite competitiva. Actualmente se encuentra a las puertas de una posible tercera corona seguida, algo que ya logró en la era del PRODE 85. En esa ocasión, logró coronarse en las tres finales disputadas, consolidando su hegemonía.
Otros clubes históricos también han tenido su momento de dominio con tres finales consecutivas. Cruz Azul lo hizo a inicios de los años 70, ganando dos de ellas. Pumas repitió la hazaña entre 1976 y 1979, mientras que Tigres lo logró en torneos cortos entre 2016 y 2017. Sin embargo, ninguno ha combinado esa racha con una seguidilla de semifinales tan extensa como la de América.
Además, el América se mantiene como el club con más finales jugadas en la historia de la Liga MX, con un total de 21 apariciones. Esta cifra no solo muestra su constancia, sino también su alto nivel de competitividad. De esas finales, ha ganado el 70%, un porcentaje que lo sitúa como uno de los clubes más efectivos en partidos por el título.
El proyecto deportivo del América ha demostrado una planificación a largo plazo, respaldada por una base sólida de jugadores y cuerpo técnico. Su éxito no ha sido producto de la casualidad, sino de un modelo que ha sabido adaptarse a las exigencias de cada torneo. Esta fórmula le ha permitido mantenerse entre los favoritos torneo tras torneo.
Con la posibilidad de disputar otra final, las Águilas no solo aspiran al tetracampeonato, sino también a seguir marcando hitos en el fútbol mexicano. El récord de siete finales consecutivas sigue vigente como meta lejana, pero las marcas actuales ya lo han confirmado como el equipo más regular y dominante de la última década.
