A pesar de superar la primera década de historia, la Liga Mexicana de Baloncesto Profesional Femenil (LMBPF) enfrenta en 2025 una nueva temporada con claroscuros, propios como la inclusión de tres nuevas franquicias como las Penguins de Ciudad de México, Dragonas de Toluca y la Universidad Modelo de Mérida, Yucatán, pero aún sin apoyos que hagan crecer la competencia.
Ante una campaña en 2025 bajo el nombre de “La Liga de México”, el presidente de la competición, Arturo Flores, señaló que la tarea pendiente que tiene esta categoría creada en 2014, es acercarse a más patrocinadores que ayuden al desarrollo del campeonato y saber venderse, algo que no han podido en estos años.
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Actualmente colocados como un primer escalafón entre el nivel universitario y el profesionalismo, Arturo Flores recalcó a 24 Horas que aún con una década de historia, quienes se han mantenido en competencia muchas veces han tenido que subsistir con sus propios recursos, al no ser hoy un liga comercialmente rentable.
“No es fácil que los equipos puedan sostenerse y aunque muchas veces se cuenta con apoyos públicos de los gobiernos, nos ha pasado que los detienen y eso ha hecho que algunos no se mantengan”, indicó.
Buscan ser vistas
Ahora con una expansión que los llevará por primera vez a Mérida, con la adhesión de la Universidad Modelo, la visión de La Liga de México renovada, es que se visibilice en más partes de la república para ganar aliados, con participantes hoy en Guanajuato, Zacatecas, Celaya o CDMX, entre otras sedes.
Incluir a este equipo también representará una serie de dificultades a resolver, como el gasto y la logística que implicará trasladar a plantilla a otras sedes como el sureste, agregó Arturo Flores.
Al ser una competencia que abarca los primeros cinco meses del año en su calendario general y a pesar de que hoy la Liga Nacional de Baloncesto Profesional Femenil tiene con apenas tres años un mayor impulso económico y mediático (patrocinados por un casino de renombre internacional), en la LMBPF no ven dicha categoría como una competencia, ya que entre sus principios deportivos está el impulsar el talento nacional y universitario, antes que darle espacio a prospectos extranjeros.
“Uno de los objetivos que se ha mantenido es tener a jugadoras mexicanas como base. En la temporada pasada se superaron las 130 atletas nacionales inscritas. Todos los entrenadores son mexicanos como otra de las características fundamentales dentro de nuestra liga”, agregó.
