Durante sus poco más de tres años de existencia, el hoy desaparecido Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) erogó 376.8 mil millones de pesos, sin haber logrado cumplir con el objetivo de otorgar servicios de salud de calidad a la población ni sustituir a su antecesor, el Seguro Popular, siendo uno de los principales fracasos del sexenio pasado.
Tanto así que el artífice de su creación, el expresidente Andrés Manuel López Obrador, admitió en julio pasado que el Instituto nunca consiguió sus objetivos y representó un “tropiezo administrativo para su Gobierno, por ello la decisión de desaparecerlo y crear el IMSS-Bienestar.
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Con ello, el ahora exmandatario dejó el poder sin haber cumplido una promesa que postergó cada año de su sexenio: el consolidar el sistema de salud nacional para convertirlo en uno similar al de Dinamarca.
Heredando esa tarea a su sucesora, la presidenta Claudia Sheinbaum, quien busca consolidar al IMSS-Bienestar para llevar los servicios de salud gratuitos a personas sin seguro social de todo el país.
Sin embargo, el experimento del expresidente tuvo un costo para el país, pues el Seguro Popular creado por el expresidente panista Vicente Fox desapareció, bajo acusaciones de corrupción, dejando sin sus servicios a la población no asegurada.
Además de que durante su corta vida, el Insabi erogó 376.8 mil millones de pesos, los cuales no se reflejaron en una mejora para el servicio de salud de los mexicanos, causando su desaparición.
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En octubre de 2023, el exprocurador general de la República, Ignacio Morales Lechuga, acusó mediante su cuenta de X, que las solicitudes de transparencia hacia el Insabi se desechaban, con el argumento de que el Insabi ya había desaparecido.
Ante ello, señaló que “este podría ser el desvío más grande del sexenio y nadie ha dicho nada”.
Pozo sin fondo
Creado en noviembre de 2019 por el presidente Andrés Manuel López Obrador, es decir, unos días después de la aprobación del Presupuesto de Egresos 2020, comenzó a operar sin recursos asignados de forma directa por el Congreso de la Unión, por lo que se le transfirieron adecuaciones presupuestales líquidas para comenzar a operar.
En 2020, el Instituto gastó 106 mil 124 millones de pesos, de los cuales 96 mil 590 millones se destinaron a gasto corriente, principalmente en los rubros de “Subsidios”, con 52 mil 686 millones de pesos, y “Otros de Corriente”, por 37 mil 45 millones de pesos, correspondientes principalmente a transferencias al Fondo de Salud para el Bienestar, de acuerdo al Análisis del Ejercicio del Presupuesto de Egresos de la Cuenta Pública 2020 de la Secretaría de Hacienda.
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Para el siguiente año (2021), el Instituto gastó 113 mil millones de pesos, 26.5% más de lo que le aprobó el Congreso. Mientras que para 2022, el gasto alcanzó los 114 mil 513 millones de pesos, 10.8% superior a lo que le aprobó el Congreso.
Fue en 2023 cuando finalmente el gasto del instituto descendió, incluso por debajo de lo que le asignaron los legisladores federales, con apenas 43 mil 187 millones de pesos, es decir 59.7% menos de lo aprobado… Debido a la súbita desaparición del organismo, el 1 de junio de 2023, transfiriendose los recursos al nuevo proyecto de salud federal, el IMSS-Bienestar, y a la Secretaría de Salud.
MSA
