Redacción
El presidente Joe Biden concedió un indulto a su hijo Hunter Biden, quien enfrentaba condenas por cargos de evasión fiscal y posesión de armas. Esta decisión, tomada después de años de investigación, sorprende a muchos, especialmente porque Biden había sido claro en su compromiso de no intervenir en los casos legales de su hijo. A pesar de esta promesa, el indulto otorga clemencia a Hunter por varios delitos federales y abarca un período de tiempo extenso.
Hunter Biden fue condenado por mentir en un formulario federal al adquirir un arma en 2018 y por un esquema para evadir impuestos durante varios años. Estos casos, que se remontan a un período en el que luchaba contra el abuso de sustancias, podrían haberle acarreado penas de prisión significativas. Sin embargo, la intervención presidencial no solo cubre estos cargos específicos, sino que también extiende el perdón a cualquier otro delito federal en el que pudiera haber estado involucrado desde 2014 hasta finales de 2024.
El indulto, aunque legalmente permitido por la Constitución de Estados Unidos, ha sido una herramienta polémica utilizada por varios presidentes para beneficiar a familiares y aliados. La decisión de Biden rompe su compromiso de no influir en el proceso judicial de su hijo, algo que había reiterado en varias ocasiones. Sin embargo, el mandatario justificó su acción al afirmar que su hijo fue «selectiva e injustamente procesado», señalando que la acusación contra Hunter se había politizado y que su trato había sido distinto al de otros acusados en situaciones similares.
El presidente Biden también expresó que el proceso judicial que enfrentó su hijo estuvo marcado por un esfuerzo político de sus opositores para desacreditar a la familia Biden. En su declaración, afirmó que Hunter fue objeto de un ataque implacable, especialmente después de su rehabilitación por adicciones, y que este indulto busca corregir una injusticia. Este acto de clemencia resalta las complejas interacciones entre la política, la familia y la justicia en el escenario de la administración Biden.
Este indulto no es único en la historia presidencial de Estados Unidos. Otros mandatarios, como Donald Trump y Bill Clinton, también utilizaron su poder de indulto para beneficiar a familiares y allegados. En el caso de Trump, por ejemplo, indultó a su yerno Jared Kushner, y a su suegro, Charles Kushner, mientras que Clinton benefició a su medio hermano y a una exasociada comercial. A pesar de estas precedentes, la decisión de Biden ha generado debates sobre la ética y la legalidad de indultar a familiares directos, especialmente cuando se percibe que el proceso judicial está influenciado por la política.
