Una maroma más la que se acaba de aventar Napillo. Y es que el imitador de minero lleva más de tres semanas paseándose por Europa. Se podría decir que tomó unas vacaciones de lujo, obviamente patrocinadas por los mineros, y como siempre, usando como pretexto la lucha obrera.
Esto, además de evidenciar que es un vividor al que le gusta viajar gratis, también muestra la necesidad que tiene Napoleón Gómez Urrutia de hacerse publicidad en el extranjero, ya que aquí en México, por más que hace, los mineros ya no lo pelan. Incluso su propio partido ya hasta lo “pelusea”.
Así como hace 22 años se autonombró trabajador minero para ser dirigente nacional y robarse las cuotas sindicales y como hace 15 años se autonombró dueño del Fideicomiso Cananea para apropiarse de mil millones de pesos, ahora va al extranjero autonombrándose representante de todos los trabajadores de México. Lo más cómico de este último punto, es que Napillo nunca ha sido trabajador y tampoco cuenta con el apoyo de nadie.
Gómez Urrutia no es capaz de pararse en una mina o ir a una planta a saludar y escuchar a los compañeros, porque simplemente no le da la gana. Pero no le digan “viaje al extranjero”, porque ahí sí le sobra el tiempo y recursos para cumplir sus caprichos y lujos. ¿O qué? ¿Ya se olvidó de cuando alquilaba castillos en Europa para pasearse con su familia?
Napillo debería decirle a sus agremiados cuánto cuesta cada una de sus “vacaciones con mote de gira de trabajo”, en qué hoteles se hospeda y en qué restaurantes come. Ha sido captado en diversas ocasiones despilfarrando el dinero de los mineros en restaurantes exclusivos para millonarios. Se sabe que el Sindicato Minero, propiedad de Napillo, es uno de los identificados por la autoridad por no rendir cuentas del uso de los recursos a sus agremiados.
La bajeza de Gómez Urrutia es tan grande que, mientras él se da la gran vida con dinero ajeno, tiene al mismo tiempo a los trabajadores de la mina Tizapa con un pie en el cuello, privándolos de su derecho al trabajo y castigándolos sin poder cobrar un sólo peso para el sustento de sus familias. Desde hace meses mantiene un paro en esta mina y como siempre no ha dado la cara a las y los compañeros a quienes tiene impedido ingresar a trabajar.
Las y los mineros de Tizapa que están con el FRENTE no permitimos estos abusos, preparamos una demanda por privación del derecho al trabajo y, por otra parte, una jueza nos autorizó demandar al sindicato de Napillo por daños y perjuicios. Los mineros del FRENTE no pagarán los caprichos del líder de lona.
¿Qué trabajador se siente a salvo representado por un estafador que robó mil millones de pesos a sus agremiados? ¿Qué trabajadora se siente protegida con un supuesto representante obrero que deja sin comer a los hijos de sus agremiados?
Y también, ¿qué líder sindical se siente identificado con un dirigente que permitió que 65 mineros murieran en una explosión a cambio de dinero o que acostumbra imponer cuotas sindicales con cualquier pretexto para después usar esos recursos como propios? Sé que hay algunos que se sienten reflejados y hasta se han hecho socios y compadres de Gómez Urrutia.
A Napillo se le está desmoronando el sindicato. Los trabajadores están cansados de lo mano larga y tirano que es. Hace unos días perdió otra sección sindical en Mazapil, Zacatecas. Por ello, la urgencia de hacer alianzas en el extranjero, no vaya a ser que, una vez más, tenga que salir huyendo del país.
