Naim Qassem, nuevo líder de Hezbolá, afirmó que el grupo chií está dispuesto a aceptar un alto el fuego con Israel, siempre y cuando sea bajo términos que se consideren aceptables.
Como parte de su primer discurso tras su nombramiento, después del asesinato de Hasán Nasralá a manos de Israel, Qassem reveló que “si los israelíes deciden detener la agresión, estamos dispuestos a aceptarlo, pero solo bajo las condiciones que consideremos adecuadas y apropiadas”.
Sin embargo, el dirigente destacó que Hezbolá “no rogará por un alto el fuego”, al señalar que los esfuerzos políticos para alcanzar una tregua no dieron resultados concretos. “No se ha propuesto un proyecto que Israel acepte y que podamos discutir”, añadió.
Asimismo, el líder chií advirtió a Israel que debe abandonar el Líbano. “Si te quedas, pagarás más de lo que has pagado en tu vida”, dijo Qassem, quien además señaló que Hezbolá podría mantener la lucha “durante días, semanas y meses”.
Finalmente, reconoció que el asesinato de Nasralá y otras figuras de alto nivel fue un golpe “doloroso” para la comunidad y se comprometió a continuar la estrategia de guerra establecida por su predecesor.
“Mi programa de trabajo es una continuación del programa de trabajo de nuestro líder, Sayyed Hassan Nasrallah”, y prometió seguir adelante con “el plan de guerra que desarrolló”.
