Redacción
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de México llevó a cabo una videoconferencia enfocada en el uso del lenguaje incluyente y no sexista, como parte de sus acciones para promover la igualdad sustantiva y el respeto a la dignidad humana en los espacios públicos e institucionales.
La actividad titulada Lenguaje Incluyente y No Sexista fue impartida por Gerardo Castillo Enríquez, capacitador certificado del organismo, quien expuso la importancia de adoptar formas de comunicación que reconozcan la diversidad social y eviten expresiones que reproduzcan estereotipos o prácticas discriminatorias.
Durante la ponencia, se explicó que el lenguaje no solo cumple una función comunicativa, sino que también influye en la forma en que se construyen realidades sociales y se perciben las relaciones entre las personas. Desde esta perspectiva, el uso de un lenguaje incluyente contribuye a generar entornos más equitativos y respetuosos.
El capacitador señaló que una comunicación libre de sesgos favorece la visibilización de todas las personas, fortalece la empatía y posiciona a las instituciones como espacios de escucha y acompañamiento, alineados con los principios de los derechos humanos.
Asimismo, se presentaron ejemplos prácticos para incorporar el lenguaje incluyente en distintos ámbitos, como el institucional, el educativo y el profesional, con el fin de que esta práctica se refleje en documentos oficiales, mensajes públicos y en la interacción cotidiana.
Se subrayó que el lenguaje incluyente no se limita a una serie de reglas gramaticales, sino que representa una postura ética orientada al respeto, la igualdad y la dignidad de todas las personas, independientemente de su identidad o condición.
Con este tipo de capacitaciones, la CODHEM busca fortalecer una cultura organizacional basada en el trato digno, la no discriminación y la promoción de la igualdad sustantiva como eje de la convivencia social.
La comisión refrenda así su compromiso con la difusión de buenas prácticas comunicativas que contribuyan a consolidar una cultura de paz y al ejercicio pleno de los derechos humanos en el Estado de México.
