Redacción
La Embajada de Israel en México condenó el ataque armado registrado en la playa Bondi Beach, en Sídney, Australia, durante la celebración de la festividad judía de Janucá, hecho que dejó al menos 11 personas muertas, de acuerdo con información proporcionada por autoridades australianas.
Según los reportes oficiales, dos hombres armados abrieron fuego contra personas que se encontraban reunidas en la playa, uno de los puntos más concurridos de Sídney. El ataque ocurrió este domingo en el marco de una celebración religiosa y fue calificado por las autoridades como un acto terrorista.
A través de un posicionamiento público, la representación diplomática israelí manifestó su consternación por los hechos y expresó su respaldo a las víctimas y a la comunidad judía. “Enviamos nuestras condolencias a las familias de las víctimas y expresamos nuestro firme apoyo a la comunidad judía de Australia en este momento tan difícil”, señaló la Embajada de Israel en México.
La sede diplomática también advirtió sobre la gravedad del ataque al considerar que se trató de un acto de violencia motivado por odio religioso, lo que refuerza la preocupación internacional sobre el incremento de agresiones contra comunidades judías en distintas regiones del mundo.
En su mensaje, la embajada subrayó que este hecho evidencia la persistencia de expresiones de odio que derivan en violencia letal. Afirmó que “este grave suceso es un doloroso recordatorio de que el antisemitismo no es un fenómeno del pasado, sino un flagelo peligroso que continúa manifestándose en todo el mundo y que se expresa mediante incitación violenta y crímenes de odio mortales”.
Asimismo, reiteró su solidaridad no solo con la comunidad judía australiana, sino también con quienes enfrentan y combaten el antisemitismo en el ámbito internacional, al considerar que se trata de un problema que requiere atención constante y acciones coordinadas.
Hasta el momento, las autoridades australianas continúan con las investigaciones para esclarecer los hechos y determinar la responsabilidad de los agresores, mientras se mantiene el apoyo a las víctimas y a sus familias tras el ataque ocurrido en un espacio público durante una celebración religiosa.
El ataque en Bondi Beach se suma a una serie de incidentes violentos que han encendido alertas a nivel global sobre la seguridad en eventos comunitarios y religiosos, así como sobre la necesidad de reforzar estrategias para prevenir delitos motivados por odio.
