Cristian Millan
Los New York Giants han tomado una decisión drástica al despedir a su entrenador en jefe, Brian Daboll, tras un decepcionante arranque de temporada con marca de 2-8. El técnico de 50 años había sido reconocido como Entrenador del Año de la NFL en 2022, cuando llevó al equipo a los playoffs, pero desde entonces su proyecto se ha desmoronado con resultados que no han cumplido las expectativas.
La etapa de Daboll al frente de los Giants ha pasado de la euforia al desencanto en apenas dos años.
Después de una campaña prometedora en 2022 con un récord de 9-7-1, el equipo ha mostrado una preocupante caída de rendimiento, terminando 6-11 en 2023 y ahora enfrentando otra temporada perdida. La directiva ha considerado que era momento de un cambio urgente para intentar salvar lo que queda del año.
Los malos resultados han sido el principal motivo detrás de su salida. Los Giants han ganado solo dos de sus primeros diez partidos y se han hundido en el último lugar de la División Este de la Conferencia Nacional. Además, las derrotas han llegado acompañadas de un bajo nivel de ejecución ofensiva y defensiva, lo que ha aumentado la frustración entre la afición y el vestuario.
A lo largo de la temporada, el equipo ha mostrado una preocupante falta de consistencia. En cuatro ocasiones, los Giants han desperdiciado ventajas de doble dígito ante rivales como los Cowboys, Saints, Broncos y Bears, demostrando una incapacidad para cerrar los encuentros. Estas desconexiones han sido determinantes para que el equipo pierda partidos que parecía tener controlados.
Otro factor que ha pesado en la decisión ha sido la polémica en torno al protocolo de conmoción cerebral. Daboll ha sido multado con 100 mil dólares por violar las normas de la NFL en un caso ocurrido en octubre, lo que ha generado críticas hacia su gestión y ha deteriorado aún más su relación con la liga y la organización.
Ante la salida de Daboll, los Giants han anunciado que Mike Kafka, actual coordinador ofensivo, asumirá de manera interina el cargo de entrenador en jefe. Kafka tendrá la tarea de estabilizar al equipo y recuperar la moral del vestuario, mientras la directiva evalúa opciones para un reemplazo permanente al cierre de la temporada.
La salida de Daboll ha marcado el final de una etapa que comenzó con esperanza y terminó en decepción. Los Giants han buscado un nuevo rumbo para salir del fondo de la clasificación y volver a ser competitivos en una de las divisiones más exigentes de la NFL, confiando en que el cambio de liderazgo pueda reavivar el espíritu de lucha del equipo.
