Redacción
Más de 10 mil personas participaron en la “marcha por la paz” realizada en Uruapan para exigir justicia por el homicidio del alcalde independiente Carlos Manzo Rodríguez, ocurrido hace una semana. La movilización comenzó alrededor de las 10:15 de la mañana sobre la avenida Latinoamericana y avanzó hacia el centro del municipio.
Los asistentes portaron prendas blancas y sombreros, además de pancartas con mensajes de exigencia de paz y justicia. El recorrido se desarrolló de manera pacífica y reunió a habitantes de distintas colonias, trabajadores, comerciantes y representantes de organizaciones sociales.
A lo largo del trayecto, los participantes recordaron al edil, conocido popularmente como “El del Sombrero”, quien fue asesinado el pasado 1 de noviembre durante un evento público del Festival de las Velas. De acuerdo con las autoridades, un joven de 17 años le disparó a corta distancia con una pistola calibre .9 milímetros, causando su muerte.
El agresor, identificado como Víctor Manuel Ubaldo Vidales, fue abatido en el lugar por los escoltas del presidente municipal. La Fiscalía General del Estado informó que el arma utilizada también estuvo involucrada en al menos tres ataques previos registrados en la región.
Durante la jornada, numerosos establecimientos y comercios de Uruapan suspendieron sus actividades como muestra de solidaridad y exigencia de justicia. El paro se extendió desde primeras horas del día, mientras que el transporte público interrumpió sus recorridos entre las 10:00 y las 12:00 horas, con excepción del servicio de taxis.
La Fiscalía mantiene abiertas las investigaciones para ubicar a dos posibles cómplices del atacante, quienes habrían estado presentes en la plaza durante el atentado. Las autoridades también buscan determinar la identidad del autor intelectual del crimen.
El homicidio del alcalde y la participación de un menor de edad en el ataque provocaron conmoción en el estado, donde se han reforzado las medidas de seguridad en torno a los funcionarios locales. La movilización en Uruapan se convirtió en un acto simbólico de unidad ciudadana frente a la violencia que afecta a la región.
