Redacción
La percepción de inseguridad entre la población mexicana aumentó durante 2025, luego de haber alcanzado niveles históricamente bajos en años anteriores. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Inegi, al cierre de septiembre seis de cada diez adultos —el 63 por ciento— considera que vivir en su ciudad es peligroso.
El estudio, que analiza la sensación de seguridad en 91 localidades urbanas del país, mostró que en la mayoría de las ciudades no hubo cambios significativos respecto al trimestre anterior; sin embargo, en cinco de ellas se registró un incremento en el miedo de la población, mientras que en diez mejoró la percepción de seguridad.
Culiacán, Sinaloa, e Irapuato, Guanajuato, encabezan la lista de las ciudades donde más habitantes se sienten inseguros, con 88 por ciento de la población. Les siguen Chilpancingo, Guerrero, con 86.3 por ciento; Ecatepec, Estado de México, con 84.4 por ciento, y Cuernavaca, Morelos, con 84.2 por ciento. Estas localidades se ubican como las más peligrosas según sus propios residentes.
En el extremo opuesto, San Pedro Garza García, Nuevo León, se mantiene como la ciudad con menor percepción de inseguridad del país: sólo 8.9 por ciento de su población dijo sentirse en riesgo. Piedras Negras, Coahuila, registró 15 por ciento; la alcaldía Benito Juárez, en la Ciudad de México, 15.6; Los Mochis, Sinaloa, 19.2, y San Nicolás de los Garza, Nuevo León, 22.4 por ciento.
La encuesta también muestra una diferencia marcada entre hombres y mujeres. Mientras 68.2 por ciento de las mujeres considera que su ciudad es peligrosa, entre los hombres la proporción baja a 56.7 por ciento. Este contraste de más de diez puntos porcentuales refleja el impacto de la violencia de género en la percepción de seguridad cotidiana.
Para las mujeres, el riesgo no sólo se concentra en espacios públicos. Tres de cada diez señalaron sentirse inseguras en sus lugares de trabajo y dos de cada diez en sus escuelas o viviendas. En cambio, los hombres mencionaron en menor proporción esa percepción en ámbitos privados, concentrando su temor principalmente en calles, transporte público o cajeros automáticos.
De acuerdo con los resultados del Inegi, los delitos más comunes entre los hombres son el robo, asalto y homicidio, mientras que las mujeres son víctimas con mayor frecuencia de delitos sexuales, abuso o violencia familiar.