Redacción
La Casa Blanca colocó un nuevo límite en el conflicto de Medio Oriente. El presidente Donald Trump anunció que Hamás dispone de tiempo hasta el 5 de octubre para responder al plan de paz impulsado por Washington junto a Israel. La advertencia incluyó la amenaza de intensificar los ataques en caso de negativa.
El documento, presentado el 29 de septiembre con el respaldo del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, contiene veinte puntos que abarcan desde la liberación inmediata de rehenes hasta el desarme del grupo islamista. Esa última condición aparece como el principal obstáculo, dado que la organización palestina la ha rechazado en distintas ocasiones.
El ultimátum circuló a través de un mensaje en redes sociales del propio presidente estadounidense, donde señaló que la noche del domingo constituye el límite para alcanzar un acuerdo. La comunicación insistió en que la propuesta cuenta con apoyo internacional y en que una negativa abriría la puerta a una ofensiva militar más amplia contra Hamás.
El grupo que controla la Franja de Gaza desde 2007 revisa actualmente la propuesta, de acuerdo con fuentes cercanas a su dirigencia. La revisión interna ocurre en un contexto marcado por tensiones crecientes, con una población civil afectada por bloqueos, enfrentamientos armados y una crisis humanitaria de gran magnitud.
El plazo fijado por Washington coloca la presión sobre las negociaciones y reconfigura el tablero diplomático, al tiempo que alimenta la incertidumbre sobre una posible escalada militar en la región.
