El fenómeno del anime Demon Slayer: Infinity Castle (Demon Slayer: Castillo infinito, en español), parte de la saga Kimetsu no Yaiba, ha generado tanta expectativa y éxito, y es que continúa dominando las salas de cine.
Ante el éxito rotundo es que se volvió a colocar en el primer lugar de la taquilla del fin de semana con una recaudación de 17.3 millones de dólares, superando por un margen estrecho al estreno de Him, la más reciente propuesta de terror deportivo producida por Jordan Peele, que debutó con 3 mil 168 salas con ingresos de alrededor de 13.5 millones de dólares.
También te puede interesar: Fans abarrotan los cines con el estreno de ‘Demon Slayer-El Castillo Infinito’
Tras ello, es que desbancó a El Conjuro 4: últimos ritos y le quitó el récord a Pokemon First movie, como el mejor lanzamiento de una película de anime.
Consolidándose así como la película de anime más exitosa en la historia de la región; motivo por el cual incluso, se podría perfilar a las nominaciones del reconocimiento más grande del cine: los Premios de la Academia, el Oscar 2026.
¡Por los Oscar!
De acuerdo con una publicación en la cuenta de X (@DemonSlayerSc) se dio a conocer que el CEO de Crunchyroll, Rahul Purini, confirmó que Demon Slayer: Infinity Castle se dirige a los Oscar.
Ello al considerar que es una “película es increíble, con una animación, historia, y calidad en todos los aspectos”
Por lo que sentenció que “harán todo lo posible para que sea considerada en TODAS LAS CATEGORÍAS a las que podría optar”.
AFP |
Contras para ganar la estatuilla
Algo a considerar es que, para calificar al Oscar se requieren ciertos criterios como: cantidad de salas, duración del estreno en cines (“qualifying run”), que esté disponible para los votantes de la Academia, subtítulos o doblaje adecuados, etc.
De tal manera que, si la película logra cumplir todo eso, sube sus posibilidades, si no, podría quedarse fuera.
También te puede interesar: Demon Slayer se mantiene en la cima de la taquilla mundial
Asimismo, podrían influir las percepciones culturales y prejuicios, y es que aunque el anime ha ganado más aceptación, todavía hay barreras culturales, por lo que algunos votantes pueden desconocer el género o tener prejuicios sobre lo que se considera “arte serio” frente a entretenimiento popular.
En tanto, el que sea un anime de acción intensa podría jugar en su contra frente a animaciones más contemplativas, innovadoras visualmente, o basadas en historias auto-contenidas no franquiciadas.
