Tiene dos expedientes.
Uno federal donde entra la delincuencia organizada, y otro del fuero común por asociación delictuosa, extorsión, robo de combustible y otros delitos.
Pero no son los datos claves.
Acaso lo peor para Hernán Bermúdez Requena es la larga vigilancia a la cual fue sometido desde las alturas del poder por sus entonces actividades sospechosas.
Una parte estaba a cargo de la Marina, el Ejército y por supuesto la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de Omar García Harfuch.
Durante años lo vigilaron y tal vez por eso desde hace tiempo, en 2021, se conocían las andanzas del funcionario pese a la protección oficial.
Porque aunque designado por el gobernador tabasqueño Adán Augusto López, fue ratificado y cobijado por su sucesor Carlos Manuel Merino y operó con entera libertad.
Hasta el arribo de Javier May, quien enfrentado con Adán Augusto decidió destapar el conflicto de interés: Bermúdez Requena era autoridad y a la vez lideraba al grupo criminal La Barredora.
Y VIENEN MÁS DATOS
Hoy el exjefe policiaco está perdido.
Las autoridades tienen sábanas donde se documenta, con llamadas y transcripciones, los vínculos de Hernán Bermúdez Requena con los capos.
Él trata de frenar la orden de aprehensión con amparos y sus abogados trabajan frenéticamente en ello, pero la milicia ha puesto a disposición de las autoridades toda la información.
Parte de esos documentos fueron claves para la integración de la denuncia del Ministerio Público Federal (o la Fiscalía General de la República, es lo mismo) en lo fundamental: delincuencia organizada.
Eso es lo penal.
El tema es hasta dónde se pretenderá llegar en lo político, sobre todo porque afecta a una de las figuras morenistas señeras, Adán Augusto López, quien ha iniciado una campaña de limpieza de imagen.
Control de daños, le llamaban en el pasado los estrategas de la comunicación, hoy usado con el fin de mantener y fortalecer al tabasqueño al frente del Senado de la República.
VACACIONA EN JAPÓN
1.- Era cuestión de esperar.
Pero ya se supo dónde anda el junior Andrés Manuel López Beltrán, secretario de Organización del partido paterno y de gobierno y quien pide no llamarle Andy.
Vacaciona a placer en Japón, según los informes, y fue la causa por la cual no acudió el domingo al Consejo Nacional de Morena.
Reparte su tiempo en múltiples actividades.
Por una parte, recibe lecciones de su padre Andrés Manuel López Obrador sobre política y en especial en manejo político de militantes.
Con las nuevas enseñanzas, tras su poco éxito electoral en Veracruz y Durango, se dispone a emprender la segunda campaña de afiliación de diez millones de ciudadanos.
Si en el pasado fracasó en ese empeño y sólo logró cinco millones, ahora pretende llegar a 15 con la idea de fortalecer a Morena, pero sobre todo de evitar la nutrición de otras organizaciones políticas.
Y 2.- Hacienda inició ayer un proceso de rescate de Petróleos Mexicanos.
No ha anunciado su rescate estilo Fobaproa, pero el mensaje es claro: como Pemex ya no tiene crédito, ahora lo emitirá el gobierno en tanto se decide qué hacer.
La absorción de deuda sigue en pie.
@urenajose1