Rafael Rodríguez
Durante más de diez años, el Periférico Norte del Estado de México permaneció en estado de deterioro, sin recibir los cuidados ni el mantenimiento necesario para un tramo vial que soporta diariamente el paso de más de 200 mil vehículos. Esta situación generó no solo congestionamientos y daños a los automóviles, sino también inundaciones recurrentes y problemas graves para la movilidad en varios municipios.
Al frente de la Junta de Caminos, Ariel Juárez Rodríguez asumió el desafío de revertir esta problemática, reactivando la operatividad del organismo y poniendo fin a prácticas irregulares que durante años favorecieron a empresas privadas a través de concesiones cuestionables.
El plan de rehabilitación contempla la renovación de 54 kilómetros de carriles centrales y laterales, con trabajos que incluyen la aplicación de más de seis mil toneladas de asfalto, bacheo profundo, la mejora del sistema de drenaje y la sustitución de tres mil luminarias. Estas acciones se ejecutan en colaboración con los municipios de Naucalpan, Tlalnepantla, Atizapán, Tultitlán, Cuautitlán Izcalli y Tepotzotlán, quienes también se ven beneficiados con esta intervención.
El compromiso de Juárez Rodríguez no ha estado exento de obstáculos. Los intereses que durante años se lucraron con contratos irregulares han reaccionado con ataques constantes, pero él ha logrado recuperar cerca de 400 millones de pesos anuales, recursos que se destinarán a un mantenimiento real y constante de esta vía estratégica.
Esta recuperación forma parte de un proyecto más amplio impulsado por la gobernadora Delfina Gómez Álvarez, quien ha manifestado su intención de transformar la red carretera del Estado de México, buscando garantizar que todas las vías sean plenamente funcionales y seguras para los ciudadanos.