El consumo de alcohol en México es un detonante de violencia y su alta incidencia está invisibilizada en todos los niveles: institucional, familiar y social, de acuerdo a expertos.
Los costos directos e indirectos asociados al consumo de alcohol en México se estiman en 552 mil millones de pesos al año, un problema agravado por factores estructurales y comerciales, por lo que los expertos proponen aumentar a 21 años la edad mínima para consumirlo e incrementar los impuestos a bebidas embriagantes.
Este miércoles, se presentó el estudio “La relación del alcohol y la violencia en México: Testimonios de profesionales de la salud”, presentado por la Red de Acción sobre Alcohol (RASA), mismo que indica que la violencia, asociada al consumo de alcohol, es de las principales causas por las que las personas buscan atención médica o psicológica, pero, en la mayoría de casos, las víctimas no lo reconocen y lo tienen normalizado.
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El documento también identificó que factores como la pobreza y la desigualdad, así como los determinantes comerciales de la salud, entre ellos, la disponibilidad de alcohol y la alta publicidad y promoción de las bebidas alcohólicas, se encuentran dentro de los principales factores de riesgo tanto para el consumo de alcohol como para la violencia
La investigación tuvo como objetivo escuchar las experiencias de violencia de las personas usuarias de servicios de atención, identificar los factores de riesgo asociados y hacer explícitas las recomendaciones de tratamiento y las necesidades de política públicas manifestadas por las y los profesionales.
Relacionan consumo de alcohol con violencia
De acuerdo con el estudio, las principales formas de violencia asociadas al consumo de alcohol son psicológica y emocional, seguida de la violencia física, sexual, económico-patrimonial e intentos de feminicidio.
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La mayoría de los participantes estuvo de acuerdo con que el consumo de alcohol y la violencia de género están estrechamente ligados, identificando al alcohol como la sustancia más consumida.
Según la encuesta nacional RESET, 9 de cada 10 mexicanos están preocupado por la violencia asociada al consumo de alcohol. Al respecto, un estudio en México encontró que una alta densidad de puntos de venta de alcohol, lo que dispara las posibilidades de consumo semanal.
Los expertos coincidieron en proponer que se deben impulsar políticas públicas para regular la disponibilidad del alcohol, la regulación de horarios y puntos de venta, así como la formulación de leyes que eviten que se puedan abrir puntos de venta en cualquier sitio y la prohibición de la publicidad, promoción y patrocinio. Aumento en los impuestos al alcohol e incremento de la edad mínima legal para el consumo a 21 años.