Redacción
A fin de mantener el orden, gobernabilidad, así como evitar la presencia de sustancias o artículos ilícitos en los Centros Penitenciarios y de Reinserción Social (CPRS) de la entidad, la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) cuenta con la Unidad Canina Penitenciaria.
En total, 16 perros de las razas pastor belga malinois, holandés, alemán y rottweiler, integran la unidad, los cuales cuentan con diferentes guías que en conjunto forman el binomio canino.
Algunos de los lomitos ya entrenados fueron donados por la Embajada de Estados Unidos y otros más adquiridos por la dependencia. Cabe destacar que cada uno de los canes recibió diferentes entrenamientos; la especialidad defensa controlada e impacto disuasivo se encarga de contener situaciones apremiantes o disturbios; búsqueda de narcóticos que localizan marihuana, cocaína, heroína, metanfetamina y fentanilo, además están los de doble propósito que tienen las dos especialidades.
Los entrenamientos son variados y depende la especialidad, la cual fue designada de acuerdo a su carácter o temperamento, desde ejercicios de contaminación, impregnación y asociación.
Es importante mencionar que el entrenador canino debe tener conexión y conocimiento del perro, para saber identificar los cambios de conducta del semoviente.
Dentro de los cuidados que requieren son sus horarios de alimentación, la limpieza de caniles o jaulas, y a las seis de la tarde reciben su segunda comida, además todos los días salen una o dos veces, entre media y una hora para relajarse en el área de Agility.
El agrupamiento en todo momento se apega a los protocolos de actuación y al respeto a los derechos humanos de las Personas Privadas de la Libertad (PPL) que cumplen una condena o están en proceso en los distintos penales mexiquenses.
