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Su presencia en el servicio de suscripción, junto con un precio que se ha criticado mucho, han hundido el último juego de Bethesda y Xbox en su rendimiento

Podía ser uno de los juegos más esperados de lo que llevamos de 2025, pero las ventas de DOOM: The Dark Ages han resultado ser decepcionantes. Mientras se habla de grandes logros, como el caso de Clair Obscur: Expedition 33, un estudio realizado por Alinea Analytics ha descubierto el pastel con el juego de Bethesda y Xbox. Un pastel que, pese a celebrar una participación masiva de jugadores en apenas unos días, escondían un dato que preocupa. De los tres millones de usuarios que se expusieron, apenas se habría conseguido vender un millón de copias entre las tres plataformas en las que el juego ha visto la luz.

El análisis habría expuesto una circunstancia curiosa, como es que tanto la versión de Playstation 5 como el ecosistema Xbox habrían vendido en torno a 0.2 millones cada una, sumando 0.4 millones desde Steam. Y es que 2.2 millones llegarían desde Game Pass, aunque suponemos que este registro no afecta solo a la versión de consola, sino al ecosistema Xbox.

Las ventas de DOOM: The Dark Ages no han alcanzado cifras de éxito, habiendo varios factores que justifican este bajo rendimiento

Por un lado, se asumen que su presencia, desde el lanzamiento, en el servicio de suscripción Game Pass le ha pasado factura. Se puede ver que había ganas de jugar a la última joya de la corona de los shooters. No obstante, otro factor determinante de este desnivelado rendimiento, puede ser que DOOM: The Dark Ages ha sido un juego que se ha puesto a la venta con estos nuevos estándares para el precio de los videojuegos. Un juego que se vende a 79,99 € hoy día tiene un factor disuasorio que, frente a un mes de Game Pass, no tiene parangón. 

Y podríamos señalar que hay algunos juegos que se han considerado fracasos comerciales, como el caso de Dragon Age: The Veilguard, que registraron resultados semejantes. Resulta obvio que, a falta de que cada uno ponga su criterio, las cifras de ventas no alcanzan las expectativas para un título de alto presupuesto respaldado por grandes estudios. Son varios factores los que hay que analizar en esta situación, ya que sabemos que las consecuencias de un fracaso comercial pueden ser múltiples. Del mismo modo, los factores afectan tanto al impacto de su inclusión en el servicio de suscripción, como el precio de los videojuegos. Son aspectos que mantienen un debate intenso, que se alarga por mucho tiempo.

Y no estamos hablando de un juego que no haya tenido una buena recepción por la crítica, dado que sus valoraciones son realmente buenas. A diferencia de otros juegos, que reciben un review-bombing que limita su posibilidad de éxito, en esta ocasión DOOM: The Dark Ages recibió valoraciones muy positivas.  La rentabilidad del juego dependerá de muchos elementos, como son los ingresos por Game Pass, pero es evidente que la combinación de elementos ha afectado a las ventas de DOOM: The Dark Ages, dejando unos resultados que, por si mismos, no son suficiente para rentabilizar la inversión.

Si ya se puede ver que la subida del precio es un problema, un juego que asume este nuevo estándar cuando ve la luz en un servicio de suscripción que da un acceso mucho más económico lo va a tener mucho más difícil. Un equilibrio complicado, siendo un servicio que para algunos es un trampolín, mientras para otro es un freno que no permitirá alcanzar las cifras estimadas o necesarias.

Via: Somosxbox

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