En la avenida Cuauhtémoc 19, en la colonia Roma, alcaldía Cuauhtémoc, las personas pueden acudir para desenterrar recuerdos de su infancia en forma de juguetes o adquirir artículos que siempre han buscado y esa es la magia del coleccionismo, señaló Juan Manuel León García, dependiente de la tienda Johny Toy Collector.
“El coleccionismo es tener un sentido de pertenencia, tener un producto que ya no es tan fácil de conseguir o que en sus años tú lo tenías”, explicó en entrevista con 24 HORAS.
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Juan Manuel refirió que buscar estos artículos es jugar con la nostalgia y recordar épocas en las que algún artículo hizo feliz o que siempre quiso una persona.
“Jugamos con las emociones de pertenecer o tener algo que tuvimos o que ya no lo tenemos; es ese sentido de pertenencia y la nostalgia”, subrayó el coleccionista, quien se ha desempeñado en esta labor desde hace 30 años.
Los tesoros
Entre las piezas que resguarda el establecimiento se encuentran barbies y figuras de acción, así como las cuatro versiones del tren Lili Ledy, una empresa mexicana que compraba las licencias para crear los productos; León subrayó que de esa marca la línea más buscada es la de Star Wars.
Señaló que quienes suelen acudir a las tiendas de artículos de colección rondan entre los 40 y 50 años que buscan algún artículo que tuviera mucho significado en su niñez, pero también jóvenes e infantes a los que les llaman la atención los juguetes, pues a final de cuenta “eso es lo que son”.
Aunque la mayoría de sus compradores son capitalinos, hay quienes lo visitan de otras entidades, que en su momento aprovecharon el viaje para visitarlo y ahora se han vuelto clientes asiduos.
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León comentó que el precio depende de varios factores: la disponibilidad de los artículos, si están en buenas condiciones, conserva su empaque original o si cuenta con todas las piezas “y esa es la magia de esta labor”.
Por ejemplo, hay objetos ofertados desde 150 pesos hasta alguna figura que cuesta 80 mil pesos, pero, reiteró, todo depende de las condiciones y características que presente el propio juguete.
El coleccionista subrayó que su profesión es alegría ya que el objetivo de los juguetes es recordar la emoción de cuando éramos niños.
