La extrema derecha camina peligrosamente hacia la victoria en Europa. En las recientes elecciones celebradas en tres países europeos, la derecha radical ha rozado la victoria.
En Portugal, aunque ha ganado la derecha moderada, el partido CHEGA de ultraderecha ha ganado muchas posiciones.
En Rumanía ha ocurrido algo muy parecido. En la primera vuelta la ultraderecha de George Simion ganó por goleada, pero, en la segunda vuelta logró obtener la victoria el europeísta Nicusor Dan.
Finalmente, en Polonia los liberales derrotaron a una ultraderecha que lleva unos años en el poder. Sin embargo, falta la segunda vuelta.
Italia, Polonia, Hungría, son países dónde domina la extrema derecha. En Países como España, Francia, Bélgica, Holanda, Alemania o Rumanía, la derecha radical tiene cada vez más importancia y puede llegar a gobernar.
El populismo hacia la derecha recorre Europa ante la falta de soluciones de los partidos tradicionales de toda la vida que no resuelven nada. Ante la inacción de la política ortodoxa se buscan soluciones que pueden ser más populistas, pero con mensajes efectistas. Por eso ese resurgimiento de la extrema derecha y del nacionalismo que tanto mal ha hecho en los últimos dos siglos.
Todo ello coincide con una Europa que se ahoga en su propio vómito ante su irrelevancia y marginación en el concierto mundial. Europa no está abocada a desaparecer, pero sí a ser irrelevante.
@pelaez_alberto