Debido a las altas temperaturas registradas en el país y a las diversas olas de calor que se prevén para este verano, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomendó a las personas que trabajan en lugares cerrados, como las oficinas, a beber entre 2 a 2.5 litros de agua en una jornada de ocho horas para prevenir la deshidratación, usar ropa ligera de algodón o lino en colores claros, mantener una ventilación cruzada, hacer uso de ventiladores, tener cortinas cerradas durante las horas más calurosas a fin de evitar que el sol caliente la oficina, colocar plantas que ayuden a enfriar el ambiente, entre otras para evitar el golpe de calor.
El doctor Gabriel Alejandro Real Ornelas, responsable del Área de Toxicología y Salud Ambiental de la Coordinación de Salud en el Trabajo del IMSS, informó que el calor extremo puede afectar tanto la salud como la productividad de los empleados, ya que temperaturas superiores a los 30 grados Celsius (°C) pueden reducir la eficiencia en tareas cognitivas, disminuir la atención sostenida y aumentar los errores.
“La productividad puede disminuir y el calor puede generar fatiga mental, estrés y aumentar el presentismo, impactando la calidad del trabajo”, indicó.
También te puede interesar: Candidata a magistrada lanza polémico spot para promover su campaña
Recomendaciones del IMSS para evitar golpe de calor en oficinas
Especial
Refirió que las pausas cortas durante la jornada son una estrategia efectiva para evitar el estrés térmico, por ello se recomienda que los empleados tomen descansos de 5 minutos cada 45 a 60 minutos cuando las temperaturas superen los 30°C a fin de que el cuerpo se recupere y evite la fatiga excesiva.
El especialista en medicina del trabajo y ambiental del IMSS señaló que en esta época de calor lo ideal es usar ropa ligera de algodón o lino, de colores claros, y evitar ropa ajustada y sintética.
Mencionó que para mantener una oficina fresca sin el uso excesivo de aire acondicionado se sugiere la ventilación cruzada, abrir ventanas en lados opuestos de la oficina con la intención de permitir el flujo de aire fresco y mejorar la circulación; el uso de ventiladores, mantener las cortinas cerradas durante las horas más calurosas y asegurar la hidratación constante.
Comentó que las plantas de interior, como la palmera areca, la cuna de Moisés y el ficus, pueden mejorar el ambiente de las oficinas y ayudar a reducir el calor mediante el proceso de evapotranspiración. Además, las plantas aumentan la sensación de bienestar y reducen el estrés en los empleados.
Abundó que, para minimizar la acumulación de calor en espacios de trabajo, se recomienda usar cortinas o persianas a fin de bloquear la luz solar directa, colocar plantas y usar colores claros en paredes y techos.
También, las empresas deben fomentar una cultura de cuidado y prevención frente al calor mediante la educación y concientización sobre los riesgos del calor, promover la hidratación, entre otras medidas.
Identifica síntomas
Real Ornelas llamó a los empleados a estar atentos a síntomas como mareos o desorientación, fatiga extrema, sudoración excesiva seguida de piel seca, aumento de la temperatura corporal, náuseas o vómitos. Ante estos síntomas, es crucial buscar atención médica inmediata y descansar en un lugar fresco.
Explicó que el estrés térmico en el entorno laboral también se asocia con un aumento de la irritabilidad, fatiga emocional y disminución del bienestar percibido, lo que puede incrementar los factores de riesgo psicosociales. Trabajadores expuestos a temperaturas elevadas reportan mayor tensión psicológica, ansiedad y reducción de la satisfacción laboral, lo que puede llevar a conflictos interpersonales y mayor agotamiento.
También te puede interesar: Justicia ambiental, solo con independencia judicial: Norma Piña
El doctor Alejandro Real abundó que el estrés térmico prolongado también se ha vinculado con un aumento en la percepción de carga de trabajo y la disminución del sentido de control sobre las tareas, factores clave en el desarrollo del estrés laboral.
Añadió que la temperatura en una oficina sin ventilación puede aumentar hasta 5 o 7°C más que en un espacio con ventilación adecuada debido a la acumulación de calor generado por equipos electrónicos, ocupantes y radiación solar. Explicó que, en ciudades como la Ciudad de México, durante los meses más cálidos del año —principalmente entre abril y mayo— las temperaturas pueden superar los 30 °C en múltiples ocasiones.