Ultimo Messaggio

Niños de 8 años explicarán la película de Minecraft a sus papás confundidos Estas son las producciones más reconocidas de Memo del Bosque

Bajo la consigna Hands Off, más de 250 mil personas salieron a las calles en los 50 estados de la Unión Americana en una de las movilizaciones más grandes de los últimos años. Pero detrás de los carteles y consignas se alza una maquinaria ciudadana bien articulada, liderada por organizaciones como MoveOn, Indivisible, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) y la, que supieron combinar la acción legal, la presión digital y el trabajo territorial para enfrentar lo que denominan un “asalto multimillonario” contra la democracia.

MoveOn, fundada en 1998, es una de las organizaciones clave de esta coalición. Surgió Liga de Mujeres Votantes durante el proceso de juicio político contra Bill Clinton y se consolidó como una plataforma de activismo digital. Sus campañas incluyen temas como los derechos de los dreamers y el acceso al aborto. Durante la movilización Hands Off, la organización facilitó la participación de cientos de miles de personas en pocos días. En un comunicado, la agrupación declaró: “No callaremos ante los ataques a nuestras libertades”.

Te puede interesar: Papa Francisco reaparece por primera vez después de hospitalización

Por su parte, Indivisible, creada tras la elección de Donald Trump en 2017, se inspira en las tácticas del Tea Party, pero con una agenda opuesta. Dirigida por Leah Greenberg y Ezra Levin, moviliza a más de tres mil 800 células locales. En 2024 invirtió siete millones de dólares en campañas contra políticas antiinmigrantes y a favor de procesos judiciales por corrupción política. Su participación en Hands Off subrayó una consigna clara: “Salvar la democracia requiere acción directa”.

Votos significativos

En la línea de defensa legal aparece la ACLU, el actor más robusto del movimiento. Con un presupuesto de 383 millones de dólares el año pasado, la organización no sólo ofrece representación legal gratuita a los manifestantes, sino que además encabeza demandas contra medidas ejecutivas de la administración republicana, como restricciones al derecho de protesta y la vigilancia masiva.

La Liga de Mujeres Votantes, con más de un siglo de historia, reforzó la articulación ciudadana desde el frente electoral, al enfocarse en el registro de nuevos votantes, especialmente entre mujeres jóvenes y comunidades latinas. La cifra no es menor: uno de cada cinco participantes en Hands Off era de origen hispano, lo que refleja una convergencia con causas migrantes y de justicia racial.

Los motivos de la protesta fueron múltiples, pero interconectados: exigencias de rendición de cuentas al magnate republicano, rechazo al poder empresarial que representa Elon Musk —acusado de prácticas cuestionables—, y una férrea defensa de los derechos reproductivos, el matrimonio igualitario y la protección a migrantes.

Foto: AFP | MoveOn, Indivisible y ACLU lideraron la manifestación, al combinar estrategias digitales, legales y territoriales con la consigna Hands Off

Hands Off no fue una protesta aislada, sino parte de un ciclo de movilizaciones que podrían influir en las elecciones estadounidenses de 2025, incluyendo comicios locales, estatales y legislativos. Los organizadores establecieron la defensa de derechos civiles, sociales y ambientales como prioridad en sus acciones.

 

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *