En el Senado, Morena va porque el tercer sábado de noviembre sea el “Día Nacional de la Oración por la Paz y el Bienestar Social“.
Lo anterior, mediante un punto de acuerdo propuesto por el bajacaliforniano Armando Ayala Robles, presidente de la Comisión de Recursos Hídricos de la Cámara Alta, quien basa su propuesta en que en México millones de ciudadanos practican la oración, hábito que “no necesariamente” se puede relacionar con una religión o culto.
Además, según se lee en el documento, la oración en su “esencia natural” es parte de la cultura de una persona, y que dicha práctica procura “bienestar, seguridad, salud, fortuna a la familia, seres queridos e incluso a uno mismo, e incluso se presentan en momentos de crisis de cualquier tipo“.
Además de que la paz y el bienestar del país son promovidos “por el pueblo” a través de su tejido social, por lo que -a su entender- se debe asumir la oración como “una acción puramente humana” que coadyuva a los usos, tradiciones y costumbres.
“En consecuencia, propongo que se declare el tercer sábado de noviembre de cada año, como el Día Nacional de la Oración por la Paz y el Bienestar Social”, se lee en la iniciativa de Ayala Robles.
Antecedentes
Antes de él, en la LXV Legislatura de la Cámara de Diputados, la entonces representante de Tamaulipas, la priista Karina Marlen Barrón Perales presentó una iniciativa parecida, con la misma fecha de celebración, y bajo el argumento de que México es un país laico pero no antirreligioso“.
A finales de 2024, el exalcalde de Ensenada afirmó que “está bien” ir a un table dance siempre y cuando sea con dinero propio y no público.
El 5 de diciembre, el morenista subió a tribuna para criticar los privilegios de los ministros de la Corte, y los integrantes del extinto INAI, mientras defendía la reforma judicial.
En su mensaje, el senador criticó los presuntos dispendios de algunos funcionarios, en temas como gastos médicos mayores, cirugías estéticas y hospedajes en hoteles de lujo.
“O andar pagando los table dance con dinero del erario público, como lo fue el titular del INAI. Le hicieron una investigación y resultó ser que se iba al table dance de vacaciones (…) no está mal ir al table dance, ir a observar ahí, ir a divertirse, pero con el dinero que se gana honestamente. Si se gana buen dinero, está bien que se vaya al table dance, pero con dinero del erario pues no se vale”, aseveró.
Tras su participación, el presidente de la Cámara Alta, Gerardo Fernández Noroña corrigió al bajacaliforniano al decirle que: “nosotros estamos convencidos de una igualdad plena entre mujeres y hombres y hay que erradicar toda forma de violencia contra las mujeres y una de las formas más brutales es el comercio sexual a que son obligadas las mujeres por pobreza, por desigualdad, por necesidad. Y por consiguiente, quiero manifestar esta posición desde la presidencia de la mesa directiva”.