La noticia surgió en septiembre pasado, la Guardia Nacional y el Ejército habían asegurado un rancho en Jalisco, el rancho Izaguirre en Teuchitlán, el informe señalaba que la “casa de seguridad” había sido asegurada tras un enfrentamiento y que operaba como “centro de adiestramiento”, detuvieron a 10 personas según lo posteó la Guardia Nacional el 20 de Septiembre, el aseguramiento del inmueble había quedado en manos de la fiscalía estatal, sin embargo, seis meses después, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco entró al rancho que debió estar asegurado, encontrando lo que ya es de dominio público, ropa y restos; el alcalde de Teuchitlán declaró: “Si me investigan, que me investiguen, yo estoy limpio y dispuesto a declarar lo que sé” aunque en la misma declaración dijo que no sabía nada porque el rancho “está lejos, como a 3 kilómetros”.
Los reportes de desaparecidos crecían y Enrique Alfaro lo negaba, mientras tanto, Ricardo Sánchez Beruben, titular de la Coordinación General Estratégica de Seguridad era amonestado por un delito “no grave” al omitir en su declaración “inversión” realizada en una casa de ¡apuestas!; el fiscal de Jalisco, Luis Joaquín Méndez Ruiz declaraba en 2022: “Soy intolerante a los actos de corrupción, a la impunidad, esos ya son principios, no los aprendí en los libros o en la ley (…)” ¿y?
La evidente indolencia de las autoridades ante los hechos hace que, como ésta, muchas bombas les estallen en la cara, desde el gobernador hasta los funcionarios directamente encargados de la fiscalía; en Jalisco, todos lo sabemos y dimos cuenta, la crisis de desaparecidos no es nueva ni es, desafortunadamente el único estado, sin embargo, las autoridades federales debieron haber intervenido de inmediato y no sucedió, ¿tenía que pedirlo Alfaro?, sabemos que nunca lo iba a hacer, y lo mismo sucede en otros estados que se convierten en cotos de poder de los gobernadores, fiscales y/o regidores.
Nuestra lenta, lenta justicia, solo interviene cuando el campo está incendiado y la conferencia de prensa de Gertz Manero de ayer muestra que llegan tarde y lentos, no tienen caso porque no hay expedientes en su poder, no hay una atracción formal del caso porque no se ha hecho la entrega de este y mientras, un tour de prensa fue al rancho con el fiscal general ¿para qué el show? Urge renovar también las fiscalías.
Ana María Vázquez
Escritora/Dramaturga
@Anamariavazquez
The post Nuestra lenta, lenta justicia appeared first on Diario Basta!.