La reforma constitucional que amplía el catálogo de delitos que ameritan prisión preventiva avanzó en cinco estados del país.
Tras su aprobación en el Senado, hasta el cierre de esta edición, los cambios se habían avalado en los congresos de Tabasco, Ciudad de México, Oaxaca, Guerrero, Quintana Roo y Zacatecas.
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Se requiere que al menos 17 congresos estatales aprueben la reforma para que adquiera validez y pueda pasar al Ejecutivo federal para su promulgación en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y entregada en vigor.
Los estados que aprobaron la reforma en materia de prisión preventiva tienen congresos con mayoría de Morena, por lo que avalaron los cambios sin mayor discusión.
La reforma incorpora la facultad al juez para ordenar la prisión preventiva oficiosa como medida cautelar en los casos de extorsión, actividades ilícitas relacionadas con el fentanilo y otras drogas sintéticas, así como en los delitos graves el contrabando y cualquier actividad relacionada con falsos comprobantes fiscales.
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La reforma se aprobó, pese a que la ONU envió al Senado una carta para pedir que no se avalara, además de que hay dos sentencias de la Corte Internacional de Derechos Humanos (CIDH) para eliminar la prisión automática en el país, pues se trata de encarcelar a personas vinculadas a proceso, pero sin sentencia.
leo
