Monseñor Ramón Castro Castro llamó a la unidad en México, en su primer mensaje como presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).
Esta noche, a unas horas de que el Pleno de la Conferencia lo eligiera para el periodo 2024-2027, el obispo de Cuernavaca agradeció a todos los integrantes del grupo por elegirlo, y se dijo dispuesto a servir y trabajar por la unidad:
“Necesitamos esa unidad en México (…) que yo sepa trabajar de la mejor manera y con efectividad para ser en este momento tan difícil de la historia un elemento a favor de la consolidación del Reino (que es la paz)”.
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Sobre el nombramiento de Ramón Castro Castro como su nuevo dirigente, el Episcopado detalló que se da un momento significativo para la Iglesia en México por su jubileo, y ante los “desafíos que enfrenta la nación”, por lo que se dice dispuesto a la construcción de la paz a través de la reconciliación y la justicia, y la remoción de una cultura de encuentro y solidaridad.
El nuevo presidente del CEM nació en Teocuitatlán de Corona, Jalisco, el 27 enero de 1956; se ordenó en Tijuana el 13 de mayo de 1982 e inició su servicio en la parroquia de San José Obrero, Ensenada; ingresó al servicio Diplomático del Vaticano el 1 de julio de 1989.
Estudio Filosofía y Teología en el Seminario de Tijuana. Es Licenciado en Filosofía por la Universidad del Valle de Atemajac; Licenciado y Doctor en Teología Espiritual por el Teresianum de Roma; y Licenciado en Derecho Canónico por la Universidad Pontificia de Roma. En 1985 ingresó a la Gregoriana Academia Eclesiástica, donde cursó Derecho Internacional y Diplomado en Lenguas.
Nombrado Obispo titular de Suelli y Auxiliar de la Arquidiócesis de Mérida el 2 abril de 2004 por el Papa Juan Pablo II y recibió la ordenación episcopal el 3 de junio. El Papa Benedicto XVI lo nombró el 8 de abril de 2006 Obispo de Campeche y tomó posesión el 25 de mayo. El 15 de mayo de 2013 fue nombrado Obispo de Cuernavaca por S.S. Francisco como su XII Obispo, tomando posesión el día 10 de julio de ese año.
Pandemia, “grito de Dios” por la homosexualidad
En 2020, durante la pandemia de COVID-19, Ramón Castro-en ese entonces secretario general- acusó desde dicha enfermedad era un “grito de Dios” por la homosexualidad y las mujeres que abortan.
En una homilía celebrada en la catedral de Cuernavaca, Morelos, el prelado dijo que:
“La pandemia de Covid-19 es un grito de Dios a la humanidad ante el desorden social, el aborto, la violencia, la corrupción, la eutanasia y la homosexualidad”.
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Ese día, el obispo llamó a su feligresía a reflexionar sobre la intención de la humanidad a “jugar a ser Dios” y decidir “quién vive”:
“La humanidad ha querido jugar a ser Dios y a determinar quién vive. Fíjense en 2019, 50 millones de abortos en el mundo y el ser humano a gusto y proclamando su pseudolibertad, esos son hijos de Dios y los hemos asesinado y el ser humano como si nada”.
La nueva cúpula del Episcopado Mexicano se reunirá este miércoles con la presidenta Claudia Sheinbaum.
leo
