Por Eduardo Camacho
-De cuerpo presente, con elogios de todos los partidos. Etimológicamente, Ifigenia viene del griego Iphi-genia y significa “mujer de raza fuerte”, “de linaje poderoso”, y sí, fue una izquierdista indomable. Martha, su segundo nombre, se deriva del arameo Mar, “señor” o “señora”, y era toda una dama. Martínez, patronímico de Martín, del latín Martinus, consagrado a Marte, “Dios de la guerra”, y ella dio gran batalla a la otrora mafia del poder y sus partidos hegemónicos y traidores a la patria, y Hernández es patronímico del germano Fer-nando, “el que se atreve a todo para conservar la paz”, y su última voluntad fue contribuir y atestiguar la tran-sición tersa y pacífica de un presidente humanista y demócrata a una presidenta ídem.
Alberto Pérez Dayán definirá la controversia para ver si la SCJN suspende la Reforma Judicial.
-Es la crónica de un topillo anunciado: el peñetista dirá que sí, sin analizar nada, como buen súbdito de Piñachet (por su irracional autoritarismo) o Piñocha -con perdón del muñeco de madera de Carlo Collodi- por mentirle al pueblo.
Marko Cortés presentó ante la Corte una acción de inconstitucionalidad contra la iniciativa presidencial.
-Esa enmienda ya es ley avalada por mayoría de diputados y senadores, y será una mejora para terminar con la vieja e insana práctica de juzgadores de cambiar birretes por billetes.
Anaya dijo que sería inadmisible la reelección de Rosario Piedra en la CNDH.
-Lo inaceptable es que Canallín esté en el Senado, en vez de purgar condena en un reclusorio por aceptar sobornos de Lozoya para aprobar la reforma peñergética que valió dos cosas: para nada y para lo mismo.
La diputada Sylvana Beltrones pidió licencia temporal “porque no hay condiciones propicias en el Congreso”.
-Más bien por la reelección de #LordBotox en el PRI, donde ya ni el otrora poderoso capo Beltrone tiene entrada libre.
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