Vi el capítulo de La Rosa de Guadalupe dedicado a Lady Mangos, basado en lo que sucedió con Mariana Echeverría en La Casa de los Famosos México y aunque puede parecer gracioso a muchos, no lo es para la afectada, quien considera que le hicieron bullying a nivel nacional, primero en el programa Hoy y luego en Cuéntamelo Ya, donde se sintió enjuiciada, porque sólo le pusieron videos editados y fuera de contexto y no la dejaron ni hablar.
La Rosa de Guadalupe aprovecha los temas de moda (trend topics) para estar al día y desde hace años ha sido el programa más visto.
Cuando entran a un reality se exponen a la crítica y muestran su forma de ser, el público toma partido, vota y, por lo tanto, opinan y se apasionan.
A esta producción no entran para que se hable de su trayectoria, es un experimento social, pero no miden el riesgo.
Sabemos que es un juego, pero una vez que están adentro, las reacciones no se pueden controlar, entra la pasión del público, no todos aguantan el escrutinio; a cambio les pagan muy bien, pero su imagen puede beneficiarse o perjudicarse.
Cuando salen de La Casa se dan cuenta de lo que sucedió y muchos quedan en shock y no quieren que les cuestionen sus actitudes.
Así que deberían pensarlo muy bien antes de entrar, para evitar lo que vive Mariana Echeverría, quien hizo un video donde lloró y platicó que le llegan amenazas a su celular y la insultan en redes sociales sin parar y tiene que reconocer sus errores y pedir perdón para que la dejen en paz.
Todos juzgan y a los que ven el programa disfrutan el morbo, los pleitos y los errores de los integrantes. Desde afuera es muy divertido ver los conflictos de los demás.
LCDLFMX se ha convertido en un fenómeno, donde millones de personas se involucran y la televisora genera muchas ganancias; en redes ha sido una locura.
En la primera temporada, ningún famoso quería entrar, porque no sabían de qué se trataba, al ver el éxito, muchos se apuntaron para la segunda y sucedió lo que nunca pensaron, entró Adrián Marcelo y con sus actitudes, logró el escándalo, el enjuiciamiento público y que se salieran los patrocinadores, así que prefirieron eliminarlo de la emisión.
Entonces los que dicen que tan sólo es un juego y lo que pasa, se queda dentro, se equivocan, sí repercute al exterior, es una vitrina y todo se magnifica.
Hay quienes no están dispuestos a ventilar su vida y hay quienes mueren por estar ahí, pero la producción deberá pensar mejor a quién mete, establecer reglas más claras e intervenir oportunamente, para que no se salga de control.
Nunca antes, sucedió algo así y tuvieron que improvisar, porque fue un éxito mediático, en cuanto a niveles de audiencia, pero con el problema de los anunciantes, perdieron cuantiosas sumas.
Tengo un pendiente, ¿lograrán que la tercera temporada sea más exitosa? ¿Les costará trabajo reunir al elenco?
Hay más… pero hasta ahí les cuento.
FACEBOOK y YOUTUBE Ana María Alvarado
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