Y pensar que las personas se estaban cultivando
Terraza para vibrar alto.- Un grupo de bien habidos whitexicans estaban escuchando un concierto sinfónico privado cuando en eso se dejó venir la banda sinaloense para interrumpirlos.
Los hechos aparentemente habrían ocurrido en Mazatlán, cuando en un penthouse con vista al mar, un grupo de mirreyes estaban escuchando una pieza de Haydn (o tal vez era Bocccherini) según ellos con toda calma y sintiendo que se estaban cultivando, cuando desde la playa se empezó a escuchar una banda sinaloense que vino a dar al traste con sus planes de “vibrar alto”.
Concierto gringo interrumpido por banda sinaloense (Mazatlán).
¡Órale! a gentrificar su chgsm !!! pic.twitter.com/jkjiBqnfvx
— Dany (@Dany_c_sk8) March 7, 2024
El concierto tuvo que interrumpirse por distorsión de origen
La parte más tragicómica del video es ver justo la cara de los vatos según ellos aplicando la de “carpe diem” (seaze the day, si no hablan latín) y al momento que ponían la cara de que se sentían en el pináculo de sus vidas, que les llega el sonido del inframundo que acaba con la “exclusiva” velada.
Una vez que el nuevo son entra con más decibeles, el músico con boina acorta la pieza, no sin antes voltear a la playa como para ver si la nueva serenata iba a tardar mucho, o si aprovechaba para tomar una pausa en lo que repasaba las partituras.
“No soy de la banda, pero al chile que bueno”, comentó alguien a nombre del resto de la humanidad en la publicación original.
Desconocemos si los whitexican afectados tuvieron que pagar por el concierto, o si les hicieron devolución, pero lo que sí es un hecho es que el hotel/lounge/resort donde se realizó el evento tendrá que empezar a considerar lo que venga de la playa, llámese vientos huracanados, pelícanos o cantantes urbanos antes de ofertar “conciertos exclusivos”