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El Instituto Nacional Electoral (INE) erogará más de 996.2 millones de pesos en el bono para funcionarios por carga extra de trabajo durante la organización de los comicios más grandes de la historia.

De acuerdo con la revisión al Presupuesto del INE en 2018, para el mismo fin se consideraron 401.9 millones de pesos, lo que significa que para el actual proceso electoral el monto destinado a esa prestación aumentó 147%.

La prestación se otorga desde que operaba el extinto Instituto Federal Electoral (IFE) como una compensación por las horas extra, días hábiles y festivos que no son pagados… En cambio, se les otorgan dos meses de salario.

Sin embargo, el 17 de enero pasado la Junta General Ejecutiva realizó una sesión ordinaria, en la que tanto la entonces encargada de despacho de la Secretaría Ejecutiva, María Elena Cornejo, como la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, autorizaron que el bono fuera depositado también a los consejeros electorales, por un monto de 322 mil pesos netos, lo cual no había ocurrido en la historia del organismo.

En total, son más de 996 millones de pesos que se invertirán en el bono electoral, con el rechazo de varios consejeros, que buscan la manera de reintegrar el beneficio.

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En el caso de la Presidencia del Consejo General, en la que despacha Taddei, el proyecto de gasto identificado con la clave F164910 contempla 7.1 millones de pesos para el bono tanto de la consejera presidenta, como de sus asesores, secretarios y demás personal directamente bajo su cargo.

Las oficinas de los restantes 10 consejeros tienen etiquetados 26.8 millones de pesos para la compensación extraordinaria, mientras que en la Secretaría Ejecutiva se destinarán 6.7 millones de pesos.

Según el Presupuesto del INE, aprobado el pasado 15 de diciembre con la modificación por el recorte que le aplicó la Cámara de Diputados, el Registro Federal de Electores es una de las áreas que más recursos erogará para costear el bono de los funcionarios, con 73.2 millones de pesos.

La mitad del bono ya le fue depositado a los consejeros y demás trabajadores del INE, mientras que el resto les será entregado tras terminar con la organización de los comicios, en los que se renovarán más de 20 mil cargos, entre los que destaca la Presidencia, el Senado y la Cámara de Diputados.

Al respecto, el consejero Arturo Castillo acusó que no fue consultado para la entrega del bono y exploraba sus opciones jurídicas para reintegrar ese dinero al Instituto, y así pueda ser utilizado en otros proyectos prioritarios.

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“El depósito ya se hizo, lo que estaba buscando yo era la posibilidad de que, ante el recorte presupuestal que sufrió el Instituto Nacional Electoral, que fue significativo, cerca de cinco mil millones de pesos, entonces, este recurso adicional, que yo tampoco esperaba, se pudiera transferir a algunos de los proyectos prioritarios para el proceso electoral o que requieran algún ajuste o compensación, precisamente como resultado del recorte presupuestal que sufrimos por parte de la Cámara de Diputados”, aseveró hace unos días.

Los consejeros no pueden solo optar por reintegrar los recursos, debido a que fueron depositados como parte del rubro de Servicios Personales, por lo que explora “la posibilidad de hacer un donativo, estamos en vemos, pero yo creo que eso es importante”.

Castillo señaló que no todos los consejeros estuvieron presentes cuando se aprobó que el bono electoral se otorgara al más alto nivel de mando en el INE. 

“No todas las consejerías estuvieron presentes cuando se comentó ese tema, o sea, no puedo decir que hubo un acuerdo de las 11 consejerías para aprobar algo así. Se comentó, se puso sobre la mesa. Algunas consejerías estuvieron ahí presentes, pero hasta ahí”.

También la consejera Dania Ravel ha expresado públicamente su intención de reintegrar los recursos del bono electoral para que puedan ser utilizados en los proyectos del Instituto Nacional Electoral.

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Sin embargo, la postura de la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, es diferente, pues el pasado 1 de febrero declaró a medios de comunicación que la entrega de esa prestación a los consejeros está justificada debido a la carga extra de trabajo.

“Sólo son tres periodos en los que por decisión supongo de la Junta General Ejecutiva no se incluye la plaza de consejeros electorales, pero los consejeros electorales y todo el personal somos prestadores de servicio de este instituto, todos”, justificó.

El acuerdo de la Junta General Ejecutiva resalta que “no pasa desapercibido para este órgano que las cargas de trabajo no se agotan el día de la Jornada Electoral, puesto que, incluso con posterioridad se llevan a cabo diversas tareas vinculadas a la calificación y validez de las elecciones”.

“Se dará cumplimiento con la primera parte, durante la segunda quincena del mes de enero de 2024; la segunda parte, se realizará durante la segunda quincena del de junio de 2024”, indica el documento sobre el bono que se entregará a los titulares de las más de 15 mil plazas que tiene registradas el INE este año.

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