El Fondo Monetario Internacional (FMI) exhortó ayer a México a “aumentar los ingresos no petroleros” y abordar “lagunas pendientes” en la prevención del lavado de dinero y financiamiento del terrorismo.
La economía mexicana “está en medio de una expansión generalizada” con un crecimiento previsto de 3.2% en 2023 gracias sobre todo al consumo y la inversión privada, afirma la nota publicada después de que el directorio ejecutivo aprobara el llamado Artículo IV, es decir la revisión periódica que hacen los expertos a los países miembros.
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La tasa de desempleo ha caído al 2.7% y se prevé que el país cumpla sus objetivos fiscales para 2023, añade.
El FMI espera que la contención del gasto compense la menor recaudación tributaria, especialmente del IVA, lo cual generaría un déficit de 3.9% del PIB.
“Esto debería dar lugar a una disminución de la deuda bruta del sector público” a 52.7% del PIB en 2023. El sector bancario tiene “una sólida posición de capital” y las reservas internacionales se mantienen en niveles adecuados, señala.
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Pero el FMI estima que para un crecimiento sostenible e incluyente, el país deberá llevar a cabo reformas estructurales.
Advierte contra “una postura fiscal de corto plazo innecesariamente procíclica” y subraya que México precisa “medidas decisivas en 2025 y más adelante para preservar la sostenibilidad fiscal.
LEO
